Han pasado dos años desde que la conductora de un automóvil particular que presuntamente hizo una maniobra indebida en el fraccionamiento Puente Moreno y provocó un accidente que cobró la vida de un joven, pero sus familiares siguen sin recibir justicia.
Con una simbólica manifestación en el panteón de La Esperanza del municipio de Medellín de Bravo, sus seres queridos recordaron al muchacho y exigieron que se reabran las indagatorias para que la responsable responda conforme a derecho.
Fotos: Sergio Aldazaba / IMAGEN DEL GOLFO
La noche del pasado 28 de junio del 2020, se registró un fuerte percance en la intersección de Paseo Las Joyas y Circuito Ópalo, donde José Antonio Tinoco de tan solo 19 años de edad, murió a consecuencia de sus heridas.
Aquella noche la conductora del auto de la marca Nissan tipo March color azul quiso dar una vuelta en retorno sin las debidas precauciones, pues no se fijó que con la preferencia en el carril opuesto se desplazaba el agraviado.
Fue así que el motociclista se le estrelló en un costado y salió proyectado contra la carpeta asfáltica, donde fue atendido por paramédicos de Protección Civil Municipal y murió momentos después en el hospital.
Desde entonces la familia ha tenido que sufrir por una serie de anomalías en las investigaciones, pues la conductora no fue puesta a disposición de las autoridades en ese momento y le permitieron irse a su casa.
Fotos: Sergio Aldazaba / IMAGEN DEL GOLFO
El papá del joven señaló que la patrulla de policías estatales con número 3553 la subió para retirarla, pero luego de algunos minutos la dejaron irse como si nada ya que incluso vivía a unos pocos metros de donde se dio el percance.
Algunas personas incluso señalaron que dicha mujer iba en estado de ebriedad y tampoco se le realizaron los exámenes toxicológicos pertinentes, por lo que hasta el día de hoy ella continúa libre y nunca se hizo cargo de sus responsabilidades.
/LMR
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