Exigen que CFE se responsabilice por fallecimiento de menor electrocutado en Veracruz | VIDEO

Familiares del niño Irving Mena Pacheco, así como vecinos de La Laguna, exigieron a Comisión Federal de Electricidad, que se haga responsable por la muerte del menor, quien se electrocutó debido a una mala instalación de CFE.

La muerte del niño de 13 años se suscitó el 29 de julio de 2023 en la calle Vasco de Quiroga y Árbol de la Pochota. Su abuelita, la señora Evangelina Pacheco, recordó  que el infante se encontraba en la calle, en ese entonces era temporada de lluvias, por lo que el lugar estaba inundado, accidentalmente, tocó una reja que estaba electrificada, por lo que perdió la vida.  Ante ello los familiares exigieron la indemnización correspondiente.

“Tememos porque pueda ocurrir otro accidente, ya que en la escuela dicen que también da toques  y ahí va mi otro nieto. Ya tiene tiempo que da toques ahí. Él andaba jugando como niño y pasó el accidente y yo quiero que compongan bien la electricidad”.

María Teresa López Hernández, vecina del lugar, exigió pronta atención, pues a pesar que CFE, después del accidente, constató las malas condiciones de la infraestructura eléctrica, no arregló. Advirtió que cerca del lugar hay una escuela y podría volver a repetirse un accidente similar.

“Hasta el día de hoy siguen exactamente igual dejando todo en condiciones para que otra tragedia se de. Ni siquiera porque en esta calle está la escuela primaria. CFE es una empresa irresponsable”. 

Los vecinos y familiares del menos exigieron justicia, ya que CFE no ofreció una disculpa, no les dio el pésame, no compuso la instalación eléctrica y mucho menos otorgó una indemnización o apoyo de gastos funerarios.

La tarde del sábado 29 de julio de 2023, Irving murió electrocutado en una de las calles inundadas, pues horas antes el municipio había sufrido la caída de una fuerte lluvia.

El charco de gran tamaño que se formó en la calle Vasco de Quiroga, obligó a Irving a tener que rodearlo y pasar por una orilla en su bicicleta. Para no perder el equilibrio, el menor se apoyó de una estructura metálica perteneciente a una casa deshabitada, sufriendo una descarga eléctrica que lo llevó a la muerte.