El Centro de Rehabilitación Infantil de Veracruz (CRIVER) continúa brindando atención especializada a niños con parálisis cerebral, síndrome de Down y autismo, además de atender casos relacionados con padecimientos del neurodesarrollo, como ansiedad y depresión.
El director del Criver, Abel Gutiérrez Ruiz, destacó que estos trastornos conductuales han ido en aumento desde la pandemia y siguen afectando a la niñez veracruzana. Sin embargo, el impacto no solo es en los niños, sino también en los adultos.
"Fue general, pensamos en niños, pero también en adultos. Incluso el número de papás que asisten al Criver aumentó, ya que muchos fueron afectados con esa condición que se desarrolló durante y después de la pandemia", explicó.
A pesar de la alta demanda, Gutiérrez Ruiz aseguró que el centro opera al 100 por ciento de su capacidad sin que esto afecte la calidad de los servicios.
"Los pacientes que llegan tienen padecimientos y se atienden. Estamos al máximo de nuestra capacidad, pero sin necesidad de hacer ajustes en las atenciones que prestamos", afirmó.
En 2024, el Criver brindó 134 mil servicios entre consultas y terapias para niños y adultos, consolidándose como un pilar fundamental en la rehabilitación de personas con discapacidades y trastornos del desarrollo en Veracruz.
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