En la calle Hernán Cortés, esquina 5 de Mayo, en el centro histórico de Veracruz, hay un mal de olores que a metros de distancia se percibe, pues es una alcantarilla tapada la que lo está provocando.
Mis camaradas que a diario pasan por la zona, a comprar alimentos o cualquier otro producto, tienen que taparse la nariz para no oler semejante asquerosidad.
Los que tienen sus negocios en los alrededores, aseguran que ya lleva su tiempo esa alcantarilla tapada, la cual ya empieza a esparcir sus aguas negras por toda la calle, por lo que no ven el día que lleguen y este desazolvada el área.
Hay que señalar que, la mayoría de los negocios son de comida, por lo que todos estamos expuestos a contraer alguna enfermedad estomacal, pues los tacos y demás alimentos irán con aromatizante.
Aunque eso no es impedimento para que los jarochos disfruten de los ricos placeres de la comida, no están en contra de que al menos el área esté libre de contaminación.
A ver en qué momento se les ocurre ir a destapar esa alcantarilla, pues con los calores el olor fétido será más fuerte, y eso como que no va, mis chavos.
El área está cubierta de lodo, tapando parte del desagüe, además de lo desechos que luego se quedan tirados, pues no falta quien no levante su basura.
Aquí se hace el llamado para que ya vayan a desazolvar, pues la acumulación de agua puede incrementar y causar un foco de infección más grave.
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