Las personas que todavía no reciben su aguinaldo y ya están pensando en cómo gastarlo deberían ser más cautelosas y nada ostentosas para no atraer a los amantes de lo ajeno, porque su imprudencia podría ser su peor enemigo, aseveró Jeremías Zúñiga Mezano, presidente de Comunidades Seguras.
Muchas personas desconocen la discreción y hacen intensión de sus bienes, sin detenerse a pensar en que alguien podría observarlas sin que se den cuenta de que las observan con intenciones de hacerlas víctimas y literalmente dejarlas con una mano atrás y otra adelante, dijo.
El presidente de Comunidades Seguras hizo hincapié en que los tiempos no están para descuidarse y mucho menos para presumir los bienes materiales y financieros porque siempre hay alguien que observa a los confiados y ostentosos.
Son como el gato acechando al ratón para engullirlo en cuanto se descuide, alertó.
"En diciembre todos deberán cuidar su aguinaldo porque la delincuencia no se va de vacaciones y hay que tener mucha precaución; recordemos el caso de la señora a quien le robaron el dinero del enganche de un vehículo.
"Eso refleja ya el nivel de acción de los delincuentes: ya no les importa ser grabados, ya no les importa entrar en un lugar público: prácticamente están actuando en total impunidad y lo preocupante es que están dispuestos a arriesgar cualquier condición", advirtió Zúñiga Mezano
Dejó en claro que el problema no sólo involucra a miembros de los grandes grupos delincuenciales.
"El tema no es sólo de la delincuencia organizada, sino que la delincuencia común ya está actuando como si fueran delincuencia organizada y no se sabe en qué momento atacarán", subrayó el presidente de Comunidades Seguras.
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