Covid-19 aceleró el proceso de jubilación obligatoria a personas de la tercera edad

El Covid no sólo ha dejado secuelas en materia de salud, sino también laboral porque aceleró el regreso a casa de personal no joven, al que en muchos casos ya no se reinstaló y se quedó en calidad de jubilado cuando aún es útil y productivo, señaló Benjamín Gutiérrez García, expresidente del Congreso del Trabajo en el estado.

Con el argumento de evitar contagios entre personas se aplicó el 'homework' o trabajo en casa o desde casa, vía internet, sobre todo para no exponer a las personas de mayor edad.

Cabe señalar que mucho personal fue jubilado y hasta despedido, con lo cual nunca volvió al trabajo y sobrevive con una pensión que no le alcanza para lo mínimo.

El expresidente del CT en el estado de Veracruz criticó el prescindir de personal valioso y con experiencia, con excusas como el que cuidan su salud o para que ya se vaya 'a descansar'.

Dijo que lo mismo pasó en pequeños talleres, tiendas, farmacias, restaurantes y otros giros, donde se sacrificó a personas de 50 años o más y al reabrir no los recontrataron, pese a su experiencia, conocimiento y capacidad para sacar de apuros a los dueños.

Resaltó que a fin de cuentas un jubilado le cuesta al gobierno pero a las empresas no parece importarles y los desechan.

"Los de 60 años en adelante ya somos otra generación que no encaja. Antes, a los 60, 70 años, 'caja y te vas'. Ahorita la gente está llegando a los 100.

"Antes, al jubilado el gobierno lo mantenía 4 a 5 años y se moría; ahora va a ser por 20 a 30 años porque están llegando a los 100 años: si te jubilas a los 60 te faltan 40 años que el gobierno tendrá que pagar sin que te inserte en un mercado laboral", subrayó Gutiérrez García.

Urgió a los diputados federales a revisar la legislación laboral porque es una situación que tarde o temprano será un problema y porque se insiste en ver como improductivas a personas con capacidad para trabajar y contribuir la economía.