Desde que inició la vacunación en Veracruz, el macro centro instalado en el Instituto Tecnológico de Veracruz se ha distinguido por su excelente atención a la ciudadanía, esta vez, ahora con la vacunación a los niños de 5 a 11 años de edad, no es la excepción.
Algunos de los módulos han desarrollado estrategias para que la vacuna no sea una experiencia traumática para los menores, ya que muchos de los pequeños le temen a las inyecciones, uno de ellos es el módulo número 19, donde el niño es recibido por una “heroína”, quien inicia una charla, donde le explica parte del proceso de la vacuna y justo en el momento en que el menor es inyectado, ella le dice cómo debe de manejar su respiración, por lo que en menos de un parpadeo queda vacunado, sin la menor molestia para el pequeño.
En este módulo, una de las jóvenes estudiantes de enfermería es la encargada de preparar la vacuna y aplicarla, con gran destreza y rapidez, otra es la que se encarga de pedir al padre de familia la documentación que incluye la autorización para aplicarle la vacuna al menor, mientras que una más es la encargada de requisitar los documentos y entregar el comprobante al papá.
Pero quien, sin duda es la heroína, es la joven que se encarga de mantener calmado al niño, pues mientras le pregunta su nombre y habla con el menor, la enfermera aplica la vacuna y el niño no alcanza ni a quejarse del piquete, incluso la opinión de ellos es que: “ni sintieron”.
Una vez aplicada la vacuna, los pequeños pasan, junto con su padre o madre, a una sala donde dan recomendaciones en caso de dolor de brazo, fiebre o molestias generales, que pudiera causar la reacción de la vacuna, sin embargo, en la gran mayoría de los casos no se han reportado ningún tipo de molestias.
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