En la Cuaresma y después en la Semana Santa es fundamental proteger la salud, por sobre todas las cosas, reflexionar y meditar, aseveró Julio Flores Carranza, administrador parroquial transitorio en la Catedral de Veracruz.
En el Miércoles de Ceniza resaltó que la Iglesia Católica siempre invita a la conversión, a la solidaridad y a compartir con quien menos tiene.
Ante la probabilidad de que miles de personas se vuelquen a playas, ríos y balnearios en la Semana Santa cada vez más cercana, aseveró que es responsabilidad de todos contribuir a que no se disparen los contagios de Covid.
"Creo que hoy, ante esta situación que estamos viviendo, la pandemia, este tipo de eventos no favorecen a la salud, sobre todo se propaga lo que es la parte del contagio; yo creo que antes de verlo desde el aspecto religioso hay que verlo desde el aspecto meramente humano y de salud.
"Cada quién es libre y se le respeta lo que quiera hacer con su vida y de su vida. Sin embargo el llamado es siempre a cuidarnos, a resguardarnos para no propagar más este virus", aseveró Flores Carranza.
Recordó que los templos católicos siguen operando al 25 por ciento de su cupo, para evitar riesgos a los feligreses y en cumplimiento de las disposiciones sanitarias emitidas por las autoridades.
Además, desde que se tomó esa medida preventiva se ha echado mano de la tecnología para reducir riesgos.
"Se mantienen las medidas sanitarias a la entrada: gel, tapete, toma de temperatura, cubrebocas sobre todo. En la Cuaresma siempre hay que cuidarse, hablando desde la cuestión de salud: quedarse en casa, si no puedes venir no pasa nada, desde tu casa síguenos a través de las redes sociales, Dios escucha.
"Sobre todo, éste es también tiempo de reflexión, tiempo de meditación, tiempo para encontrarnos no solamente con nosotros mismos, sino encontrarnos con el otro y sobre todo, con Dios también", aseveró el clérigo.
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