Cierra el Centro de Voluntarias de Rehabilitación A.C. en Veracruz

Luego de brindar servicio de rehabilitación de forma gratuita a cientos de niños veracruzanos, durante 40 años, el Centro de Voluntarias de Rehabilitación cerró sus puertas.

Con gran tristeza, las Damas Voluntarias de Rehabilitación y sus aliados, especialmente el Club Rotary International se despidieron en emotiva reunión en donde la presidenta y corazón de este centro, Reina Margarita Canseco de Zamorano dio un sentido mensaje de agradecimiento a quienes siempre le brindaron la mano para continuar con la atención a niños con discapacidad.

Fue el 31 de julio, el último día en que el Centro que se ubicaba en instalaciones prestadas por el Club Rotary International, ubicadas en Miguel Ángel de Quevedo, dio sus últimas terapias y clases, pues con el paso del tiempo, se convirtió en escuela para atender las necesidades de los pequeños que llegaron en busca de una mejor calidad de vida.

Un sueño que Reina Margarita Canseco de Zamorano hizo realidad hace 40 años pues no sólo logró fundar un Centro de Rehabilitación Integral para niños y jóvenes con parálisis cerebral y otras discapacidades, también logró brindar educación a los pequeños, que con el paso de los años se convirtieron en adultos productivos, algunos de ellos alcanzaron niveles de licenciatura, un logro realizado con esfuerzo y amor, no solo de los padres, también de personas como la doctora Virginia López, quien por muchos años fungió como directora.

Fue el primer Centro de Rehabilitación Integral en el estado de Veracruz, por lo que a lo largo de 40 años cosechó muchos reconocimientos locales, como el otorgado por Imagen de Veracruz por su labor altruista, así como a nivel nacional e internacional.

A finales del mes de agosto realizaron el último recorrido en las instalaciones, acompañadas del licenciado José Antonio Mendoza García, presidente del Patronato Paul P. Harris a quien le entregaron las llaves del inmueble que hace 37 años otorgaron en comodato.

Es así como se cierra una institución de ayuda, generosidad, amor y dedicación en beneficio de los niños veracruzanos, pero que prevalecerá en la memoria y en los corazones de quienes, gracias al Centro de Rehabilitación Integral, hoy pueden avanzar con paso firme en sus vidas.