Lo que se pensó era una falla en una motoneta Italika color rojo y negro, llevó a su joven propietario a decidir acudir a un taller mecánico en el que la sorpresa fue mayúscula al descubrir que el error venía por la presencia de enorme serpiente.
Dicho reptil de unos dos metros de largo se encontraba entre el motor y escape de la unidad de modelo atrasado que, era revisaba en un taller de la avenida Hidalgo en el Centro de la ciudad.
Una vez que los encargados del local descubrieron la inusual presencia alertaron de esto a personal policíaco y de Protección Civil (PC), los que finalmente aseguraron al ejemplar conocido también como "ratonera".
Aunque todo quedó en el susto, finalmente el ejemplar fue llevado a una reserva para garantizar su seguridad.
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