De manera satisfactoria, se recupera Hary, estudiante de 20 años, luego del trágico accidente que costó la vida de su amigo de la infancia Eduardo N, en medio de aparatosa colisión registrada la madrugada del domingo 30 de enero, en la esquina de la avenida Justo Sierra y calle Mérida, a dónde resultó como responsable Ángel Cristóbal, empleado petrolero que manejaba en presunto estado de ebriedad.
Desde esa fecha, el sobreviviente del percance quedó internado en un hospital de la ciudad, en un principio su situación era crítica, pero al paso de las horas los médicos que lo atendieron lograron estabilizarlo y regresaron las esperanzas de superar las diversas fracturas y traumatismo que sufrió.
Se ha conocido que Hary, continuará en recuperación por tiempo indefinido, siendo la prioridad para la ciencia médica, atender las lesiones que en su momento lo pusieron en riesgo de muerte.
En lo que concierne al conductor del carro, probable culpable, sigue en las celdas del Centro de Reinserción Social (Cereso) Duport Ostión, a donde continuará, por lo menos, durante los próximos seis meses luego de ser vinculado a proceso.
Cabe recordar que esa fatídica madrugada “Lalo” murió de manera instantánea, quedando su cuerpo tendido en el pavimento, frente a las instalaciones del Centro de Convenciones, al ser impactados en la motocicleta en la que viajaban.
Gracias a la manifestación social, se concretó la puesta a disposición de Ángel Cristóbal, sujeto que desde el momento que se dio el percance intentó escapar, siendo capturado en flagrancia por la Policía Estatal. Después de esto, su salida de los separos en las primeras 48 horas era inminente, lo que mereció el repudio de la población para ejercer presión y exigir justicia real.
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