Un sujeto que presuntamente fue sorprendido cuando se metió a un domicilio ubicado en calle de la reserva Tarimoya para robar, fue sometido, recibió la golpiza de su vida y lo dejaron amarrado a media calle.
Este viernes por la tarde vecinos de la víctima quien habita sobre la calle Marañón entre Mangle y Mulato, fueron quienes las socorrieron al escuchar sus gritos de auxilio tras ver en infraganti al individuo.
Una joven madre de familia de aproximadamente 25 años de edad, descansaba en su recámara debido a que no hace muchos días tuvo a su bebé, por lo cual se encerró con llave.
Sin embargo, alcanzó a escuchar algunos ruidos y de un momento a otro vio como intentaban meterse a su recámara, por lo que comenzó a gritar por ayuda a sabiendas de que no se trataba de ninguno de sus familiares.
Los vecinos que escucharon los gritos de auxilio, de inmediato salieron en su apoyo y cuando el maleante pretendía darse a la fuga, lograron someterlo por la fuerza y lo derribaron para comenzar a golpearlo.
Fueron varios minutos en los que los colonos ‘le dieron su merecido’ al supuesto ladrón, al cual cachetearon, patearon e incluso le dieron con un palo, mientras otros más solicitaban el apoyo de una patrulla.
Posteriormente sacaron un mecate con el cual le amarraron las manos a la espalda y lo sujetaron a su propia bicicleta para evitar que escapara, por lo cual el sujeto comenzó a llorar para pedir clemencia y pedía que lo entregaran a la policía.
Elementos de la policía estatal llegar un momento después para liberar al individuo de sus amarres y llevárselo a la comandancia correspondiente, pero el sujeto todavía pidió que lo subieron a la patrulla con su bicicleta por temor a que se la robaran.
Finalmente el individuo quedó tras las rejas en las instalaciones del C5 donde se determinará su situación legal, ya que la familia del domicilio dijo que interpondría la denuncia correspondiente.
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