Asesinan a tres campesinos lecheros en sur de Veracruz

Pobladores de San Juan Evangelista, enlutaron luego del violento asesinato de tres campesinos la mañana de este viernes y ahora exigen al gobierno de Veracruz que les devuelvan a la policía municipal.

Cuando recién iniciaban sus actividades, una mujer y dos hombres dedicados la compra y venta de leche, fueron ultimados a balazos en la zona entre las localidades de El Cautivo y en Monte Verde, en lo que aparentemente se trató de un asalto al que opusieron resistencia.

Los primeros reportes señalan que les tres victimas que eratrabajadoras del campo, llevaban consigo una suma de efectivo ya que se disponían a pagar la leche que acopian en la región, pero fueron emboscados por un grupo de maleantes.

Los agraviados han sido identificados como los hermanos Manuel y Martina Martínez Bello, así como un sobrino de estos que quiso defenderlos, pero fueron ultimados por disparos con un arma calibre .22.

Luego de esto, los habitantes de la región se encuentran sumamente indignados, pues no se cuenta con vigilancia en la zona desde hace muchos meses en que el gobierno de Veracruz decidió desaparecer a la Policía Municipal de San Juan, que era reconocida por su trabajo, y poner a la Fuerza Civil.

Luego de que se dio el cambio de corporaciones, los índices de violencia en San Juan se desataron como en otros años, pues de nueva cuenta el robo de ganado, así como incluso de aves de corral y los asaltos están a la orden del día sin que nadie los ayude.

Tan solo habría que recordar que apenas en marzo pasado, un grupo de sujetos armados, vestidos de civil, ingresaron a San Juan para llevarse por la violencia a un par de personas en el poblado de Miguel Alemán, que horas después fueron liberadas por la Marina en Mecayapan.

La población de San Juan no está contenta con el trabajo desarrollado por la Fuerza Civil, ya que antes de su arribo este tipo de eventos no se daban, había seguridad y tranquilidad para trabajar, y el ganado estaba seguro en los corrales.

Ganaderos, campesinos, comerciantes y la población en general piden de regreso a su policía municipal. Mientras la violencia cada vez es más notoria y matan a inocentes como estos compradores de leche que solo se dedicaban a trabajar, asesinados por quitarles unos pesos.