Aunque reconoció que el líder del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro Moreno, "no es santo de su devoción", el presidente Andrés Manuel López Obrador manifestó su inconformidad por la forma en que se desarrolló la diligencia judicial en su casa en Campeche ayer por la tarde.
En la conferencia matutina, el mandatario federal calificó este cateo a la propiedad del dirigente tricolor como "algo indigno", ya que vulnera la dignidad de las personas.
"Quiero expresar mi inconformidad en la forma en que entraron a hacer una diligencia a la casa del líder del PRI, Alejandro Moreno, es indigno, porque no se puede humillar a las personas", dijo.
Recordó que esto mismo sucedió con las propiedades del dictador iraquí Sadam Husein y el ex presidente de Bolivia, Evo Morales.
“Tengo dos cosas bien presentes: Cuando Televisa entró, por gestiones ante el gobierno de Estados Unidos, con cámaras a la casa de Sadam Husein y un reportero famoso mostró de cómo vivía, y se hizo todo un espectáculo. Y recientemente lo que le hicieron a Evo, que, igual, entraron a su domicilio y grabaron todo para degradarlo, además con pintas racistas. No estoy de acuerdo con eso”.
López Obrador aseguró este acto judicial debería de haberse hecho sin tinte propagandístico, por lo que dejó en claro no estar saliendo a la defensa del político priísta, pero apuntó que esos “procedimientos no deben prevalecer en un país democrático y respetuoso”.
La residencia de Moreno está ubicada en Lomas del Castillo en Campeche y ahí vivió cuando fue gobernador, fue cateada este ayer lunes por agentes ministeriales como parte de las diligencias que hay en su contra por supuesto enriquecimiento ilícito.
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