Las relaciones diplomáticas con España seguirán en pausa, a pesar de la visita del canciller Juan Manuel Albares a México, indicó el presidente Andrés Manuel López Obrador.
En la conferencia matutina, el jefe del Ejecutivo Federal aclaró que su propuesta de pausar las relaciones con ese país no tiene que ver con su pueblo, sino con las empresas de élite, quienes “no actuaron con decencia”.
“Tenemos diferencia con estas empresas, como es el caso de Iberdrola, empresas que tiene que ver con la industria eléctrica, pero eso es independiente de las relaciones de amistad, las relaciones que siempre se han tenido con España, desde luego interrumpidas durante el Franquismo.
Pero nosotros le tenemos un gran reconocimiento al pueblo español, nuestro respeto, pero no es un asunto del pueblo español, es un asunto de empresas de la elite económica, política, que no han actuado con decencia, pero eso no significa ruptura de relaciones”.
Subrayó que esta postura es para dejar atrás contratos que únicamente son rentables para empresas como Repsol, quienes sacaron provecho de la compra de las acciones de Petróleos Mexicanos (Pemex) a precios bajos, lo que afectó la hacienda pública.
Mencionó también a los beneficios que obtuvo OHL por los contratos de autopistas, pero dijo que el caso más penoso es el de Iberdrola, dedicada al negocio de la luz, de la energía eléctrica y quien además contrató como consejero a un expresidente de México.
“Esa es una ofensa, llevarse de empleado a un expresidente de México. Y todavía tenemos asuntos ahí pendientes porque obtuvieron subsidios, ventajas muy favorables, todo por el tráfico de influencia”.
Sin embargo, dijo que no tiene “fobia” al pueblo español, pues es un pueblo trabajador, “un pueblo migrante que simboliza lo que ha significado la migración en el mundo, de cómo el que sale por necesidad de su país, dedicado al trabajo constante, puede obtener un patrimonio, ese es un ejemplo en el caso de España”.
Por lo que dijo que, cuando habla de pausar, es para que políticamente se internalice una realidad, la relación anterior con España estuvo caracterizada por el abuso de empresa españolas en nuestro país y aunque cueste mucho trabajo que se acepte que se comprenda, México no es tierra de conquista.
Pese a esto, López Obrador insistió en que la relación con España es fraterna y no hay motivo para que se dé una ruptura, porque además ese país ha entendido que ésta ya no se puede dar en las mismas condiciones que en el periodo neoliberal, y lo que muestra este entendimiento es el beneplácito que otorgó Quirino Ordaz, como nuevo embajador de México.
En este contexto, López Obrador le dio la bienvenida e informó que no sostendrá ningún encuentro de carácter oficial con el canciller español.
Dijo que Juan Manuel Albares sostendrá reuniones con reunirá con el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo y visitará el Senado de la República.
/pn
Nosotros | Publicidad | Suscripciones | Contacto | Aviso de Privacidad
Reservados todos los derechos 2024 |