México registra la cifra más alta de muertes de personal sanitario a escala internacional de acuerdo con un análisis de la organización global Amnistía Internacional. En el país han fallecido mil 320 médicos, enfermeros, paramédicos, trabajadores en hospitales y otros servicios de salud a causa del COVID-19.
La cifra para México es incluso mayor que en Estados Unidos y Brasil, los países con mayor incidencia de muertes y contagios, en donde se registran mil 077 y 634 fallecimientos de trabajadores sanitarios respectivamente.
Otros países que presentan niveles altos de fallecimientos de personal médico son Reino Unido (649 muertes), Rusia (631), India (573), Sudáfrica (240), Italia (188), Perú (183), Irán (164) y Egipto (159).
El informe destaca en el caso especial de México que los trabajadores de limpieza de los centros médicos y hospitales son más vulnerables a las infecciones por la naturaleza de sus actividades; además de que gran parte tienen contratos temporales o están fuera de la protección laboral y la seguridad social.
En el mismo se acota que: “Es posible que las cifras de los países no siempre sean directamente comparables debido a los diferentes métodos utilizados para reunir los datos, así como por las definiciones de las personas trabajadoras de la salud utilizadas en los distintos países.
“Es probable que estas cifras tengan una subestimación significativa, debido al subregistro de muchos de los países incluidos en el análisis”.
Por su parte en Brasil se destaca la falta la falta de protocolos y protección al personal de salud. Según la Associação Brasileira de Saúde Coletiva (ABRASCO), una asociación de profesionales de la salud, denuncia la ausencia de protocolos claros para manejar las infecciones, la ausencia de apoyo en salud mental, la mínima protección social para los miembros de la familia y los contratos precarios para los reclutados eventuales.
Pese a los altos números de personal de Salud fallecido a causa de la enfermedad, Amnistía Internacional destaca la transparencia en la información brindada por el gobierno de México.
“Amnistía Internacional destacó el hecho de que el gobierno mexicano lleva un registro detallado de muertes de personas trabajadoras de la salud, con datos desglosados por edad, género y profesión. Esta transparencia es esencial y todos los países deberían poner a disposición este tipo de detalles; también puede servir para explicar las inquietantes cifras de México en relación con otros países”.
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