La audiencia en el juicio que se le sigue a Ricardo Anaya Cortés, ex candidato presidencial por el PAN, por cohecho, asociación delictuosa y operaciones con recursos de procedencia ilícita, fue diferida hasta el próximo 8 de noviembre.
El juez de control, Marco Antonio Fuerte Tapia, aceptó el argumento de la defensa, quien señaló que apenas el viernes pasado la Fiscalía General de la República (FGR) les entregó mil hojas más de la carpeta de investigación, por lo que no tuvieron tiempo para analizarlos.
Anaya Cortés compareció a la audiencia mediante videoconferencia; sin embargo, el juez advirtió que su defensor, Eduardo Ismael Aguilar Sierra, no se conectó desde el mismo lugar, por lo que les advirtió que para la próxima audiencia deberían estar juntos.
Esto, como un medio para comprobar que el acusado se encuentra aún cercano al juzgado, un requisito que se le impuso desde el pasado 26 de agosto.
Estrategia ‘bien pensada’
En un video difundido previo a la audiencia, Anaya Cortés apuntó que se reabrió una investigación que data de 2017, en la cual ya se determinó la no acción penal en su contra, esto en respuesta a su solicitud de la carpeta de investigación por las actuales acusaciones de asociación delictuosa y lavado de dinero.
Anunció que cuenta con “una estrategia legal muy bien pensada” que tomará tiempo en desarrollar, “pero no tengan duda de que la verdad va a triunfar. Las mentiras (…) quedarán sepultadas. Se tendrán que tragar sus palabras y la justicia volverá a ocupar el lugar que le corresponde”.
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