Un trágico caso de violencia ha conmocionado a México, y ha generado un profundo llamado a la justicia en redes sociales. Alejandra Rivas, una mujer de 35 años, y su hija de un año, María Fernanda, fueron halladas sin vida el pasado fin de semana en Colima, tras haber sido reportadas como desaparecidas el 1 de noviembre.
Las investigaciones apuntan a que ambas fueron asesinadas presuntamente por José Mariano, expareja de Alejandra y padre de la niña, quien, según la Fiscalía de Colima, planeó el ataque días antes de su llegada.
Alejandra y su hija partieron el 1 de noviembre desde Tlajomulco con rumbo a Colima, donde José Mariano, quien hasta ese momento no había reconocido legalmente a la niña, las recogería.
La familia de Alejandra recibió un último video en el que ella informaba haber llegado a Colima, pero luego se perdió todo contacto. Preocupados, sus familiares emitieron una denuncia de desaparición el 4 de noviembre.
Las autoridades de Colima, a través de la Fiscalía Especializada en la Investigación en Materia de Desaparición de Personas, desplegaron un operativo que, días después, condujo al hallazgo de los cuerpos de Alejandra y su hija en un predio del municipio de Cuauhtémoc.
Los informes preliminares indican que el presunto agresor las habría llevado a un motel, donde, según las investigaciones, las asfixió antes de trasladar los cuerpos al lugar donde fueron encontrados.
El presunto responsable, José Mariano, fue identificado y detenido por la Fiscalía de Colima. Según las investigaciones, el sujeto había planificado el ataque debido a diferencias con Alejandra sobre el reconocimiento de su hija, además de temer que su actual pareja descubriera la relación extramarital.
Actualmente y aunque no se han dado a conocer todos los detalles, las autoridades de Colima han confirmado que el detenido también enfrenta otro cargo penal en proceso.
La noticia del asesinato de Alejandra y María Fernanda ha provocado una fuerte reacción en redes sociales, donde familiares, amigos y ciudadanos exigen justicia y castigo para el responsable.
En mensajes de apoyo, muchos usuarios han destacado la urgencia de una respuesta firme ante estos crímenes de alto impacto, subrayando la vulnerabilidad de las mujeres y menores en el contexto actual de violencia.
La historia de Alejandra y su hija resalta la urgente necesidad de reforzar la protección de mujeres y niños en México. Este suceso refleja una situación en la que la violencia de género y el abuso hacia los menores exigen un sistema de justicia que garantice la seguridad de los más vulnerables.
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