Durante la conferencia mañanera, el presidente Andrés Manuel López Obrador recordó la consulta popular realizada para determinar la viabilidad de enjuiciar a expresidentes.
Aunque hubo una mayoría a favor de abrir los procesos, la consulta no pudo ser vinculante debido a la falta de participación del 40% de la población requerida.
El mandatario destacó que la venganza no es su objetivo principal y subrayó la necesidad de enfocarse en el futuro. Señaló que existen tareas importantes por realizar, como erradicar la corrupción y, además del castigo, enfatizó la importancia de la prevención.
En ese sentido, el presidente López Obrador reiteró su compromiso de no presentar denuncias contra expresidentes, afirmando que esto aplicaba para el pasado. Desde su llegada al gobierno, aseguró que la corrupción ha llegado a su fin y no se permitirá que manche la imagen de su administración.
El presidente subrayó que se informará sobre los avances en el combate a la corrupción, demostrando el compromiso de su gobierno en mantener la transparencia y rendición de cuentas.
Recordó los años pasados en los que se hacía referencia de forma inapropiada a "el año de Hidalgo", debido al saqueo y la corrupción que prevalecían en el gobierno. Sin embargo, en su mandato, esto ha llegado a su fin.
"Hay un año de Hidalgo, pero en referencia al padre de nuestra Patria; un año de Juárez, un año de Madero y un año de Lázaro Cárdenas", enfatizó el presidente, haciendo hincapié en su compromiso de seguir el legado de los líderes históricos y llevar al país hacia un futuro de justicia y honestidad.
Con estas palabras, el presidente López Obrador reafirma su compromiso de luchar contra la corrupción, construyendo una imagen de gobierno limpio y transparente, y trabajando en beneficio del pueblo mexicano.
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