Suspenden por 6 meses a ex goleador de los Tiburones Rojos de Veracruz por golpear a árbitro en un juego amateur

Tras volverse tendencia por viralizarse un video en el cual se logra ver al ex goleador de los Tiburones Rojos de Veracruz, Héctor Mancilla protagonizar una pelea mientras se encontraba jugando un partido de futbol amateur, fue suspendido por 6 meses.

Héctor Mancilla, ex delantero chileno ha estado en esta ocasión en el ojo de la polémica, esto después que haber protagonizado una pelea jugando en el futbol llanero tras su retiro profesional.

Mancilla quien es recordado por su paso en los Tiburones Rojos del Veracruz, ha estado en el centro de la controversia tras protagonizar una pelea en un partido de fútbol amateur luego de su retiro profesional, dicho incidente ocurrió en Nuevo Laredo, Tamaulipas, durante la final de la Real Liga de Fútbol Ferrocarrilera, uno de los torneos más destacados de la región.

A través de diversos videos difundidos en redes sociales, se observa a Mancilla reaccionando con enojo tras ser derribado dentro del área sin que el árbitro marcara penalti, por lo que el exjugador encaró al defensor que lo derribó, lo que derivó en un intercambio de empujones y golpes.

Como consecuencia de su conducta, el árbitro le mostró la tarjeta roja, aunque Mancilla continuó reclamando al finalizar el partido. Debido a este comportamiento, los organizadores del torneo decidieron sancionarlo con seis meses de suspensión.

El hecho generó diversas reacciones en redes sociales, pero lo que más llamó la atención fue la propia respuesta de Mancilla, quien, en redes, el exdelantero publicó un mensaje reflexivo: "Mi único rival soy yo mismo, con errores, defectos, aciertos, virtudes. Solo queda vivir, nadie va a morir mi muerte, ¿por qué querer vivir mi vida?".

Por ello, ante la controversia, la liga llanera decidió suspender el partido y declarar campeones a ambos equipos. Sin embargo, el equipo de Héctor Mancilla rechazó recibir el trofeo. Además, el exjugador de la Liga MX fue sancionado con seis meses de suspensión, la penalización más severa que el torneo puede aplicar.

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