A medida que nos acercamos al final de 2024, las estadísticas de infidelidad sugieren que los hombres siguen siendo más propensos a ser infieles que las mujeres, aunque la brecha se está reduciendo.
Diversos estudios han mostrado que han admitido haber sido infieles el 13% de las mujeres mediante las redes.
Según la agencia de investigación de Estados Unidos, Smith Investigation Agency, las razones de la infidelidad varían entre los géneros.
Los hombres suelen ser más propensos a hacer trampas por razones físicas, como la búsqueda de más sexo o excitación, mientras que las mujeres tienden a hacerlo por razones emocionales, como la falta de atención o el deseo de sentirse deseadas.
Por otro lado, un estudio realizado en el ámbito profesional también muestra que ciertos trabajos pueden influir en estos comportamientos.
En áreas como la medicina y la educación, las mujeres parecen ser más propensas a cometer infidelidades, mientras que, en áreas como los oficios y la tecnología de la información, los hombres tienen mayores tasas de infidelidad
En resumen, aunque los hombres siguen siendo más infieles en términos absolutos, las mujeres están igualando la balanza en cuanto a las motivaciones y formas de infidelidad, como las emocionales o en línea.
Los porcentajes de infidelidad entre hombres y mujeres se determinaron a partir de diversos estudios y encuestas que analizaron factores como las razones detrás de la infidelidad, la frecuencia con que ocurre y las diferencias de género en cuanto a las motivaciones. Los puntos clave que se analizaron para determinar estos porcentajes incluyen:
Tasa de infidelidad en general: Se recopilaron datos de estudios realizados en diferentes países, donde se encontró que aproximadamente el 20% de los hombres han sido infieles, frente al 13% de las mujeres
Mujeres: Las mujeres tienden a ser más infieles por motivos emocionales. El sentimiento de desatención, la falta de conexión emocional o la búsqueda de validación personal son algunas de las razones más citadas.
En algunos casos, las mujeres también recurren a la infidelidad como forma de venganza o para sentirse deseadas
Edad y contexto social: La infidelidad no es solo una cuestión de género, sino que también se ve influida por la edad, el estatus social y las circunstancias personales.
En general, las personas más jóvenes tienen una mayor tasa de infidelidad, y en algunos estudios, las mujeres menores de 30 años son casi igual de propensas a ser infieles que los hombres de la misma edad
Factores laborales y ocupacionales: El tipo de trabajo también puede influir en la infidelidad.
Por ejemplo, en sectores como la medicina y la educación, las mujeres tienden a ser más propensas a engañar, mientras que en trabajos como comercio o tecnología son los hombres quienes tienen más probabilidades de ser infieles.
En resumen, aunque los hombres siguen mostrando tasas más altas de infidelidad en general, las mujeres están alcanzando un porcentaje significativo, especialmente en contextos emocionales o de relaciones a distancia.
Las motivaciones varían, pero en términos generales, los hombres buscan más excitación física, mientras que las mujeres buscan una conexión emocional o validación.
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