El caso de Kris y Lisanne, las jóvenes que desaparecieron en un bosque tomando fotos en la oscuridad

Dos jóvenes que deciden ir con un grupo de excursión a una zona montañosa, pero de pronto se extraviaron y mientras estaban en la oscuridad tomaron fotos tratando de ver algo…o asustarlo.

Se trata del caso de Kris Kremers y Lisanne Froon,  jóvenes neerlandesas que el 1 de abril de 2014, caminaron como parte de un atractivo local por una zona llamada el sendero El Pianista en Boquete, Panamá., pero jamás volvieron del sitio.

Kris Kremers tenía solo 21 años y Lisanne Froon crecieron en Amersfoort, en los Países Bajos, Kremers acababa de terminar sus estudios en educación social cultural, especializándose en educación artística en la Universidad de Utrecht; mientras que Froon se había graduado con un título en psicología aplicada de Deventer, por lo que ambas decidieron hacer un viaje a Panamá, supuestamente para aprender a hablar el español, además era parte de unas vacaciones especiales.  

Ambas ahorraron dinero durante seis meses y planearon ir juntas a Centroamérica en unas vacaciones especiales de seis semanas. También se suponía que el viaje sería una recompensa para Froon por graduarse.

El día que Kris y Lisanne no volvieron a ser vistas jamás

Kremers y Froon llegaron a Panamá el 15 de marzo de 2014. Recorrieron el país durante dos semanas antes de llegar a la localidad de Bajo Boquete el 29 de marzo para vivir con una familia local durante un mes mientras trabajaban como voluntarias con niños.

El 1 de abril, alrededor de las 11:00 de la mañana las chicas emprendieron una caminata cerca de los bosques nublados que rodean al volcán Barú a través de un sendero llamado El Pianista, escribieron en Facebook que tenían la intención de caminar y conocer el lugar, posterior a esto, sus padres dejaron de recibir mensajes de texto de sus hijas, que hasta el día anterior habían estado enviando diariamente mensajes a familiares.

Desde el hotel hacia el lugar de la caminata las chicas se subieron a un taxi. El vehículo se detuvo en un restaurante al comienzo del sendero. No está claro en qué momento las jóvenes iniciaron su recorrido por el sendero.

Luego comienzan a subir la colina, a lo largo del camino, la ruta tiene una longitud de unos 4 kilómetros y se recorre de ida y vuelta en unas 3 a 4 horas. El sendero es popular entre los senderistas.

Se ofreció una recompensa para dar con su paradero sin éxito

Kris y Lisanne tomaron fotos donde, entre las primeras imágenes se dejaba en claro que estaban disfrutando el momento, pero luego de esto se dejó ver que había problemas y que poco a poco la tarde comenzó a caer en medio del inmenso bosque.

En la mañana del 2 de abril, las mujeres faltaron a una cita con un guía local. El 6 de abril, sus padres llegaron a Panamá junto con policías, unidades caninas y detectives de los Países Bajos para realizar una búsqueda a gran escala en los bosques durante diez días, sin éxito.

 Los padres ofrecieron una recompensa de 30.000 dólares por cualquier información que condujera al paradero de Kremers y Froon.

Las fotografías tomadas por Kremers y Froon confirman que llegaron a la altiplanicie a salvo y tomaron fotografías allí. En lugar de regresar, Kremers y Froon pasaron la línea divisoria continental y se adentraron en el bosque por un sendero que no formaba parte de la ruta.8

Las fotos tomadas del 1 de abril, las jóvenes ya estaban a una hora de la parte superior de la cuenca y continuaron caminando. En las fotografías 507 y 508, Kremers cruza un arroyo poco profundo cubierto de piedras y se para sobre una de las piedras, mirando a la cámara.9

Algunas fuentes señalan que el rostro de Froon contrasta con las expresiones alegres de las imágenes anteriores. Hay rastros de suciedad en la pierna y los pantalones cortos, como si ya se hubiera caído.10

Lo que pasó con las chicas después de que se tomaron estas últimas fotos sigue siendo un misterio. Solo se sabe que al poco tiempo se intentó contactar al servicio de rescate desde sus teléfonos móviles.

Tomaron fotos en la oscuridad

Kris y Lisanne intentaban ver algo en la oscuridad

Al percatarse que no podían escapar y que no recibirían ayuda pronto, las fotos indican que pasaron unos días en esa condición, además de los cientos de llamadas al número de emergencias tanto local como de Europa que no fueron contestadas.

Las chicas estuvieron intentando pedir auxilio, se dijo, por alrededor de 7 días perdidas en ese bosque, y esto es así, porque 8 días después de su desaparición, la última vez que hubo registro de su actividad, uno de los teléfonos se prendió durante la madrugada.

La foto es de unas ramas, unas bolsas pequeñas en una piedra, sin dejar en claro que querían fotografiar a esa hora justo en un momento donde trataban de ahorrar la poca energía que tenían.

Hay quienes sospechan que esas fotos en la oscuridad, pues no fue solo una, eran para intentar asustar a algo que las seguía o un pobre intento de ver que se estaba acercando a ellas. Sea como sea, fue la última actividad conocida de Kris y Lissane.

S sabe que tan solo el 8 de abril, se tomaron noventa fotos con flash entre la 01:00 y las 04:00, aparentemente en lo profundo de la jungla y en una oscuridad casi total.

Algunas fotos muestran que posiblemente estaban cerca de un río o un barranco. Algunos muestran una ramita con bolsas de plástico encima de una roca; otro muestra lo que parece una correa de mochila y un espejo en otra roca y otro muestra la parte posterior de la cabeza de Kremers.

El macabro hallazgo de Kris y Lisanne

Así aparecieron algo de Kris y Lisanne

Desgraciadamente, dos meses después se dio a conocer el hallazgo de una mochila lo que motivó nuevas búsquedas a lo largo del río Culebra, pues cerca estaban los pantalones cortos de mezclilla de Kremers se encontraron sobre una roca en la orilla opuesta del afluente a pocos kilómetros de donde se había descubierto la mochila de Froon.

Tiempo después, se encontraron una pelvis y un pie dentro de una bota, como si hubiera sido cortado de manera limpia, y posteriormente se descubrieron al menos 33 huesos muy dispersos a lo largo de la misma orilla del río.

Las pruebas de ADN confirmaron que los restos eran de Kremers y Froon. Los huesos de Froon todavía tenían un poco de piel adherida, pero los huesos de Kremers parecían haber sido blanqueados.

Un antropólogo forense panameño afirmó más tarde que bajo la lupa no había rasguños perceptibles de ningún tipo en los huesos, ni de origen natural ni cultural, no había marcas en los huesos en absoluto, se habían descarnado naturalmente debido a la descomposición.

A pesar de que la investigación oficial del caso terminó en 2015 y no se reanudó, aunque muchas teorías nada ha permitido saber con certeza que le pasó en el bosque, a que o quien vieron Kris y Lisanne antes de morir.