La figura más alta dedicada a la Santa Muerte no está en ningún rincón oculto ni en otro país: está en México, y se alza con nada menos que 22 metros de altura, lo que la convierte en la más grande del mundo. Se trata de una colosal representación de la llamada "Niña Blanca" que no pasa desapercibida.
Aunque este culto no es reconocido por la Iglesia católica, su crecimiento ha sido vertiginoso en las últimas dos décadas, y esta imponente escultura es solo una muestra del lugar que ha ido ganando entre creyentes, curiosos y estudiosos.
La estatua se encuentra en el Templo de la Santa Muerte Internacional, un santuario ubicado en Tultitlán, Edomex. Este sitio no solo acoge a quienes llegan a agradecer favores o pedir milagros, también ofrece misas y permanece abierto todos los días para recibir a cientos de personas que acuden en busca de consuelo, guía o fe.
La estructura llama la atención por su tamaño, pero también por su nivel de detalle: una túnica imponente, una guadaña en mano y una mirada fija que parece custodiar el lugar. Su altura equivale a la de un edificio de siete pisos.
Aunque su culto es polémico y ha sido ligado en algunos casos con la narcocultura, lo cierto es que la Santa Muerte se ha convertido en una figura profundamente arraigada para millones de personas que la consideran protectora, sanadora e intercesora en momentos de dificultad.
Según el investigador Andrew Chesnut, profesor de Estudios Religiosos en Virginia Commonwealth University, esta devoción tiene una expansión acelerada, no solo en México, sino también en países como Estados Unidos, Guatemala, El Salvador, Honduras, Colombia, Chile y Brasil, entre otros.
"La Santa Muerte es una figura que nace del sincretismo religioso", explica Chesnut, quien agrega que la imagen está asociada a Mictecacihuatl, diosa mexica del inframundo. Según su análisis, la veneración a la muerte en México tiene registros que datan del siglo XVIII, con documentos incluso de la Santa Inquisición.
Aunque no hay cifras oficiales sobre cuántos seguidores tiene la Santa Muerte, el académico estima que podría haber hasta 12 millones de devotos en todo el continente americano.
#PiezaDelDía Mictecacíhuatl, Diosa de La Muerte
— INAH (@INAHmx) October 30, 2024
Escultura de la Señora del Mictlán, representada en posición sedente, con los brazos flexionados hacia el frente, el rostro descarnado y los cabellos enmarañados; debajo de sus costillas se muestra el hígado. pic.twitter.com/GjTj4npaHg
Parte de su popularidad, señala Chesnut, radica en su reputación de actuar con rapidez y eficacia en la concesión de favores: desde cuestiones de salud y trabajo, hasta protección contra enemigos o justicia en situaciones difíciles.
Su imagen, muchas veces representada con flores, ofrendas o veladoras de colores, se ha vuelto familiar en altares, negocios y hogares de miles de personas.
Nosotros | Publicidad | Suscripciones | Contacto | Aviso de Privacidad
Reservados todos los derechos 2025 |