Ismael "El Mayo" Zambada, líder del Cártel de Sinaloa, enfrenta actualmente un proceso judicial en Estados Unidos por múltiples cargos, incluyendo tráfico de drogas, lavado de dinero y posesión de armas, pesando sobre él una pena capital.
Aunque la pena de muerte fue abolida en el estado de Nueva York en 2004, el gobierno federal puede solicitarla en casos de delitos graves, como asesinatos múltiples. Dado que Zambada fue arrestado en territorio estadounidense, es elegible para la pena capital.
Ante esta posibilidad, Zambada ha manifestado su disposición a declararse culpable de cargos que no conlleven la pena de muerte, con el objetivo de evitar un juicio que podría resultar en dicha condena. Su abogado, Frank Pérez, declaró: "El señor Zambada no quiere ir a juicio y está dispuesto a aceptar la responsabilidad de un cargo que no implica la pena de muerte".
Además, Zambada ha solicitado su repatriación a México, argumentando que su detención fue irregular y que Estados Unidos carece de legitimidad para imponerle la pena capital.
En una carta dirigida al gobierno mexicano, expresó: "Exijo y demando que el Estado mexicano cumpla con su obligación ineludible de intervenir... para exigir... que no se me impondrá ni se ejecutará la pena de muerte en su jurisdicción".
Hasta la fecha, el gobierno estadounidense no ha respondido a la solicitud de extradición presentada por México.
El fiscal general mexicano, Alejandro Gertz, señaló que, aunque Estados Unidos ha reconocido la recepción de la petición, no ha habido una respuesta formal.
Si Zambada es declarado culpable de los cargos que conllevan la pena de muerte y no se alcanza un acuerdo con la fiscalía, podría enfrentar la ejecución en Estados Unidos.
Sin embargo, su defensa está trabajando para evitar este desenlace mediante negociaciones y solicitudes diplomáticas.
En el sistema de justicia federal de Estados Unidos, la inyección letal es el método principal de ejecución para los condenados a muerte. Aunque el estado de Nueva York abolió la pena de muerte en 2004, las condenas federales pueden aplicarse en cualquier estado, independientemente de las leyes estatales sobre la pena capital.
Por lo tanto, si Ismael "El Mayo" Zambada fuera condenado a muerte a nivel federal, es probable que la ejecución se llevara a cabo mediante inyección letal, incluso si se encuentra en un estado que no aplica la pena de muerte.
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