El papa Francisco pidió a los gobiernos no utilizar el nombre de Dios para justificar una guerra e hizo un nuevo llamado a la paz, en medio de los ataques y tensiones que viven varios países en el mundo.
Durante su gira por Kazajistán, el sumo pontífice se reunió con los participantes del Séptimo Congreso de Líderes de las Religiones Mundiales y Tradicionales, advirtió que lo sagrado nunca debe ser un accesorio para el poder, ni el poder un accesorio para lo sagrado.
"Comprometámonos, pues, a insistir aún más en la necesidad de resolver los conflictos no con los medios inconclusos del poder, con las armas y las amenazas, sino con el único medio bendecido por el cielo y digno del hombre: el encuentro, el diálogo y la negociación paciente", expuso.
Posterior a la reunión, el papa ofició una misa para la comunidad católica, en la que criticó el conflicto armado que se vive en Ucrania desde febrero de este año, el cual ha causado la muerte de cientos de personas inocentes.
"¿Qué debe suceder aún? ¿Cuántos muertos más debemos esperar? (…) Pienso en tantos lugares martirizados por la guerra, sobre todo en la querida Ucrania. No nos acostumbremos a la guerra, no nos resignemos a lo inevitable", dijo.
Asimismo reiteró que la única salida es la paz y el único camino para llegar a ella es el diálogo.
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