Donald Trump reconoce que habrá "una ligera perturbación" en Estados Unidos por aranceles a México

Pese a críticas en su país Donald Trump insiste que habrá más dinero en Estados Unidos con los aranceles a México

Reconoció que podría haber un periodo de ligera perturbación, o como también lo llamó, un periodo de ajuste

El presidente Donald Trump defendió su estrategia arancelaria en su discurso ante el Congreso Federal, destacando que estos impuestos ayudarán a mejorar el flujo de dinero dentro de Estados Unidos, aunque reconoció que podría haber un periodo de "ligera perturbación", o como también lo llamó, "un periodo de ajuste" que va a repercutir en las familias de su país.

A pesar de las críticas, afirmó que los aranceles, aunque causen ajustes temporales, traerán prosperidad al obligar a las empresas a producir más en territorio estadounidense, lo que generará nuevos empleos y oportunidades.

Trump también desestimó las objeciones, subrayando que el impacto inicial podría ser leve, pero insistió en que los beneficios a largo plazo serían claros: los aranceles impulsarán la industria estadounidense, incluidos sectores clave como el acero y la agricultura, y equilibrarán el comercio con otros países.

En cuanto a la inflación, su administración ha asegurado que no se vería afectada por esta medida, ya que los ingresos generados por los aranceles compensarán los ahorros obtenidos con los recortes al gasto federal.

Durante su discurso, Trump expresó que, por mucho tiempo, Estados Unidos ha sido víctima de acuerdos comerciales injustos con otros países, especialmente con México y Canadá, con los que hay grandes déficits.

Además, señaló que estos países han permitido el paso del fentanilo, una droga que ha causado miles de muertes en Estados Unidos. "Hemos pagado cientos de miles de millones en subsidios a México, pero eso se acabó", aseguró.

El mandatario reafirmó su postura proteccionista, indicando que a partir del 2 de abril se implementarán tarifas arancelarias de reciprocidad para las naciones de Asia y Europa. Insistió en que su gobierno responderá a cualquier medida similar que otros países adopten.

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"Si nos imponen tarifas, nosotros les impondremos tarifas; si nos imponen impuestos, nosotros les pondremos impuestos; y si crean barreras para excluirnos de sus mercados, haremos lo mismo", afirmó Trump, reafirmando su política de presión económica.

Los aranceles impuestos por el presidente Donald Trump han tenido un impacto significativo en la economía de Estados Unidos. Estas medidas, que incluyen un arancel del 25% sobre todas las importaciones de Canadá y México, así como un impuesto del 10% sobre la energía canadiense, afectan a más de 900 mil millones de dólares en importaciones.

Diversos economistas advierten que estos aranceles podrían conducir a una recesión en Estados Unidos en un plazo de nueve a doce meses. Las tarifas, que representan impuestos sobre 1.4 billones de dólares en importaciones (equivalentes al 5% del PIB de EE.UU.), podrían causar interrupciones en las cadenas de suministro, congelación de contrataciones y una disminución en el gasto de los consumidores, lo que contribuiría a una estanflación, es decir, una combinación de estancamiento económico e inflación creciente.

Las empresas estadounidenses también están enfrentando desafíos significativos debido a estos aranceles. Industrias como la agricultura, la construcción y el comercio minorista están experimentando aumentos en los costos de producción y posibles incrementos de precios para los consumidores. Además, los países afectados han anunciado medidas de represalia, lo que añade incertidumbre y podría deteriorar aún más las relaciones económicas.

A nivel doméstico, se espera que los consumidores estadounidenses enfrenten precios más altos en una variedad de bienes debido a estos aranceles, lo que podría reducir la demanda y afectar negativamente el crecimiento económico.

Los expertos señalan que, aunque la intención de las tarifas es proteger las industrias nacionales, es probable que resulten en turbulencias económicas significativas, incluyendo aumentos de precios y posibles pérdidas de empleo.

En resumen, los aranceles implementados por la administración Trump están generando preocupaciones sobre una posible recesión económica, aumentos en los costos para las empresas y consumidores, y tensiones en las relaciones comerciales internacionales.