Con el rechazo de los demócratas y tras una sesión maratónica, los republicanos aprobaron la llamada "grande y bella" reforma fiscal del presidente Donald Trump, la cual incluye recortes a programas sociales, más gastos fronterizos y un impuesto a remesas de 3.5 por ciento.
Con 215 votos a favor, 214 en contra y una abstención, la iniciativa avanzó ante una oposición de un puñado de conservadores fiscales luego que se incluyó un dictamen de último momento.
Lo anterior para acelerar la entrada en vigor de los recientes de Medicaid de 2029 a 2026 y de elevar las deducciones estatales y locales.
El proyecto ahora será enviado a la Cámara de Senadores para su evaluación y voto. Este avance se define como una victoria para el presidente, ya que con esto saca adelante su agenda de recorte de impuesto.
La versión que fue aprobada este día, incluyó una sola línea en la enmienda general que reduce el monto de las remesas 5% al 3.5%.
El resto se mantuvo íntegro, por lo cual se cobrará a personas indocumentadas y con visas, pero no a ciudadanos y residentes legales permanentes.
La versión final incluyó presupuesto para completar 701 millas del muro en la frontera con México, así como 900 millas de barreras en ríos y 629 millas de barreras secundarias.
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