El penacho del México antiguo, que es conocido popularmente como El Penacho de Moctezuma, es una magnífica joya del arte plumario precolombino en torno a la cual hay una serie de misterios y polémicas sobre su origen y su llegada a Europa. Es la pieza más relevante y estudiada actualmente en la colección del Museo del Mundo de Viena, Austria.
Para México, la importancia del majestuoso tocado de metales preciosos, plumas de quetzal y otras aves, se explica porque el patrimonio prehispánico del país ha sido uno de los pilares históricos de la identidad nacional. Por esta razón, aquí te compartimos un poco de la historia y datos que debes saber sobre el tesoro arqueológico y su posible regreso al país.
El penacho de Moctezuma es un majestuoso tocado compuesto por plumas verdes de quetzal, rojas del pájaro espátula y otras de color café, turquesas y azules claras de cotinga zuleja macho; además, tiene incrustaciones de metales preciosos como oro, plata y cobre, con una dimensión de 178 por 130 centímetros.
Según la leyenda, el penacho era propiedad de Moctezuma II Xocoyotzin, y este artefacto habría sido entregado por el emperador azteca al conquistador Hernán Cortés en 1519 como un "símbolo de buena voluntad".
Persisten las dudas sobre su verdadero origen, sobre si era utilizado en rituales religiosos, si perteneció al último emperador azteca y si éste realmente se lo regaló a Cortés. Los que se sabe con certeza es que la pieza apareció a finales del siglo XVI en la colección personal del archiduque Fernando de Tirol y ha permanecido en Austria desde entonces.
Actualmente se encuentra en el Museo del Mundo de Viena y es la pieza central de la colección sobre Mesoamérica. Ha sido valuado en más de mil millones de pesos.
Regreso a México
En varias ocasiones el gobierno mexicano ha solicitado la devolución del artefacto a nuestro país; sin embargo, por diversas razones esto ha sido imposible, en parte debido al estado actual de la indumentaria, pues un viaje de regreso pondría en riesgo la pieza.
Aunque reconoció que es “una misión casi imposible”, el presidente Andrés Manuel López Obrador le pidió a Beatriz Gutiérrez Müller traer a México el penacho de Moctezuma para los festejos del bicentenario de la consumación de la Independencia.
A través de su cuenta de Twitter, el mandatario informó que Gutiérrez Müller se reunió con el presidente de Austria, Alexander Van der Bellen, con el mismo propósito de traer para una exhibición especial piezas históricas y arqueológicas al país.
Sin embargo, el curador de las colecciones de América del Norte y Central del Museo Antropológico de Viena, aseguró que la pieza no podría ser trasladada a México “al menos en los próximos diez años” pues “es demasiado frágil”, ya que el penacho está formado principalmente por material orgánico y cualquier vibración “en el aire o la carretera lo destruiría”.
“Me gustaría conocer a la persona dispuesta a asumir esa responsabilidad”, sentenció el curador.
Conservación
Van Bussel explicó también que, incluso dentro de la misma pinacoteca, no se atreven a bajarlo de la primera planta, donde está expuesto, por miedo a que pueda sufrir cualquier desperfecto.
Por este mismo motivo, el artefacto no será parte de la nueva exposición "Aztecas", que el Museo Atropológico (Welt Museum) inaugurará este jueves, y que ocupa varias galerías de la planta baja con objetos cedidos por diferentes colecciones, entre ellas, la del Museo Nacional de Antropología de México.
El curador destacó también el esfuerzo que se ha invertido en acondicionar la instalación que acoge el penacho, y que "de haber un terremoto en Viena, no se movería".
Gracias a un acuerdo bilateral entre Austria y México, los ciudadanos mexicanos que presenten su pasaporte a la entrada del museo pueden ver el penacho de manera gratuita.
Trayectoria histórica
1596
La historia documentada del penacho comienza con una descripción de los inventarios de la colección Ambras de Fernando II de Tirol (sobrino de Carlos V).
1806
El tocado permaneció en la colección de Ambras, Innsbruck, hasta 1703, y luego de varios traslados llegó a Viena, donde se expuso en 1814.
1819
El arqueólogo Eduard von Sacken atribuye su procedencia a México, y en 1878 se convierte en propiedad estatal y se envía al Gabinete de Historia Natural.
1879
El 1 de marzo se publica el primer dibujo de la pieza prehispánica realizado por Teobert Maler, en la revista La Nature.
1885
Se otorga a la pieza el número 10402, que conserva hasta hoy, y forma parte de la sección de Antropología y Etnografía del museo.
1908
La interpretación de Zelia Nutall, como atavío para la cabeza, es aceptada en el Congreso Internacional de Americanistas, celebrado en la capital austriaca.
1914
Al estallar la Primera Guerra Mundial, el Museo de Historia Natural cerró al público; en 1915 reabrió, pero la colección etnográfica permaneció cerrada.
1928
Se inaugura en Viena el Museo de Etnología y a partir de 1935 el penacho se incorpora a sus colecciones dedicadas a América del Norte y Central.
1942
Se resguarda, junto con otros objetos de gran valor, en el Banco Nacional Austriaco, en Viena, para protegerlo de los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial.
1946
Sale de Viena por primera vez para exhibirse como parte de la exposición Obras Maestras de Austria, en el Museo de Artes Industriales de Zúrich.
1960
En el transcurso de la ampliación de las salas, el museo adquiere vitrinas para exhibir el penacho; se mostró a partir de diciembre de 1961.
2017
El recinto cambia de nombre a Museo del Mundo de Viena y desde entonces el penacho es la pieza central de las colecciones americanas.
Nosotros | Publicidad | Suscripciones | Contacto | Aviso de Privacidad
Reservados todos los derechos 2024 |