Rompe los pronósticos

“Soy muy joven para que me pase”, es una frase que solemos escuchar cuando creemos que las enfermedades llegan con la edad, como el cáncer de mama, que registra las tasas más altas de mortandad en mujeres de 45 años en adelante, pero que se puede diagnosticar en mujeres más jóvenes.

Tal es el caso de Miranda McKeon, actriz de la serie de Netflix ‘Anne with an E’, quien e hace unos meses se sinceró a través de sus redes sociales al revelar su diagnóstico a sus 19 años, pese a que la probabilidad de padecer esta enfermedad a una edad tan joven es más baja, como describen especialistas del instituto médico Mayo Clinic.

“¡El rosa es mi nuevo color! Con gran tristeza, pero también esperanza, comparto la noticia de que recientemente me diagnosticaron cáncer de mama. Tengo 19 años y, según las estadísticas, ¡las posibilidades de tener cáncer de mama a esta edad son de una entre un millón!”, escribió la intérprete en un poderoso mensaje a través de Instagram.

De acuerdo con la actriz, su diagnóstico se situó en etapa 3, luego de sentir un bulto inusual en uno de sus senos; sin embargo, afortunadamente no se ha extendido más allá de los ganglios linfáticos y ya comenzó con su tratamiento de quimioterapia.

Fases

El cáncer de mama es una enfermedad en la cual las células del tejido mamario se multiplican sin control; cuando se encuentra en la tercera etapa, significa que el tumor es más grande. De acuerdo con la American Cancer Society, puede llegar a medir más de 5 cm de ancho, invade los tejidos cercanos y se propaga a los ganglios linfáticos.

Aunque no suele ser tan común el cáncer de mama en mujeres tan jóvenes, lamentablemente el pronóstico es peor que en la mujer adulta debido a que las mamas crecen más rápidamente, esto puede modificar y traer mutaciones en el tejido mamario.

Autoexploración

Si bien octubre es el mes del cáncer de mama, cada día se detectan nuevos pacientes; por lo tanto, la prevención debe ser todo el año, donde se incluyen nuestros exámenes y, uno muy importante, la autoexploración o autoexamen de mama.

Este ejercicio ayuda a conocer el estado de nuestras mamas, familiarizarnos con ellas y saber qué es normal e informar cualquier cambio. Incluye el examen tanto la vista como el tacto, con la recomendación de que, si detectas algún cambio, lo platiques con tu médico, pues, aunque la mayoría suelen tener causas benignas, algunos pueden indicar algo grave.

Si bien especialistas de Mayo Clinic, al igual que otros expertos, señalan que no siempre es una manera fiable de detectar el cáncer de mama, muchas mujeres confirman que la primera señal de cáncer de mama fue un bulto que ellas descubrieron. Por lo tanto, la razón principal para recomendarlo es el familiarizarte con la consistencia de tus mamas y detectar alguna anormalidad.

Lo ideal es hacerlo cada mes, 7 días después de la menstruación o un día fijo al mes si ya no menstruas. Eso sí, nunca sustituirá el examen mamario clínico realizado por un médico, ni una mamografía.

Enfoques

“Es importante que las mujeres se auto exploren todos los días frente al espejo, que acudan con su médico para que les indique cómo hacerlo y sea una autoexploración efectiva para detectar a tiempo algunos datos de alarma”, indica el Dr. Francisco Olguín, Director Médico de Oncología en Pfizer México.

El especialista asegura que existen dos grandes tipos de cáncer de mama: el carcinoma ductal infiltrante y el carcinoma lobulillar infiltrante, los cuales, pueden diseminarse y formar metástasis en otras partes del cuerpo.

Por ello, se recomienda que toda mujer mayor de los 20 años se realice autoexploraciones, mientras que la mamografía, extamen de detección más común para esta enfermedad, es recomendable para mujeres de 40 a 44 años de forma opcional, pero de forma obligatoria para quienes se encuentran entre los 45 y 54 años.

La ecografía mamaria puede utilizarse para determinar si un nuevo bulto en la mama es una masa sólida o un quiste lleno de líquido. Si la anomalía es sospechosa, se realiza una extracción de muestra de las células de la mama para ser analizada. Por otra parte, las imágenes de resonancia magnética suelen utilizarse en mujeres con alto riesgo de desarrollar cáncer de mama, así como una mamografía anualmente a partir de los 30 años.

Esperanza

Ante la complejidad de su caso, la actriz Miranda McKeon mantiene una actitud positiva: “Me estoy embarcando en un viaje que no elegí, pero que sé que puedo manejar. Será muy difícil, serán momentos en los que la vida parece imposible, pero por ahora me estoy enfrentando a esto con optimismo, positivismo y rodeada de amor”, se lee en sus redes sociales.

Afortunadamente, hace unos días la actriz celebró que después de ocho rondas de quimioterapia, al fin terminó parte de su tratamiento.  

El cáncer de mama es una enfermedad que en 2020 cobró la vida de más de 685 mil mujeres en todo el mundo.