Mantente firme y constante

Terminó el primer mes del año, y como es costumbre, muchas personas que se fijaron una lista de propósitos a cumplir en los siguientes doce meses, desisten y los dejan como simples planes que no van a llevar a cabo. 

No obstante, si la idea de identificar diversas necesidades y establecer un programa de acciones para cubrirlas es buena, se recomienda hacerlo una vez que se tenga la preocupación por querer mejorar algunos aspectos de la vida diaria, tal y como lo afirma el life coach Bruno Alonso García Maldonado, quien platicó con Galería sobre dicho tema. 

“Es muy común que las personas se pongan propósitos u objetivos al inicio de cada año. Lo que siempre le comento a mis clientes es que no se tienen que esperar a que sea enero o hasta fin de año para dichos propósitos, el cambio se inicia cuando uno decide hacerlo, así sea junio, septiembre u octubre, lo puedes iniciar cuando tú tomes la decisión”, dijo. 

Paso a paso

Hay algunos propósitos recurrentes, como aquellos que buscan mejorar la imagen física o la situación financiera. Sin embargo, el punto de partida es estar consciente de la forma en que se va a enfrentar dicho cambio, depende solo de la persona y el nivel de compromiso que se establecerá con determinado objetivo.  

“Uno de los principales es que quieren bajar de peso, tal vez ahorrar más dinero, mejorar financieramente, creo que esos son los más comunes. El de bajar de peso, lo que siempre les comento, es que comiencen un programa o una dieta no pensando en una fecha final, sino que inicien un nuevo estilo de vida que les pueda dar esos resultados permanentes. Eso es lo que les va a dar esa constancia”, comentó el experto. 

Por lo anterior, el life coach señaló la importancia de una transición paulatina, pues si una persona se somete a un cambio brusco, lo único que tendrá como resultado es el fastidio y la idea de que no podrá lograrlo: “Son muy duros consigo mismos, quieren erradicar malos hábitos de golpe, de un día para otro, son muy estrictos y para esto se necesita mucha fuerza de voluntad, si se puede, pero se necesita mucha voluntad”, mencionó. 

Continúo: “La gente se cansa, llevan una semana bien, están frustrados, cansados y lo dejan, dicen que eso no es para ellos, que no pueden y lo abandonan. Aquí lo que recomiendo es que vayan implementando ese nuevo estilo poco a poco. Por ejemplo, comer bien dos días y al tercero darte un gustito, otros dos días y al tercero otro gustito”.

Concentrándose en el tema del peso corporal, muchas son las ideas que se tienen sobre quienes dedican gran parte de su día a mantener un estilo de vida en el que una alimentación balanceada y el ejercicio constante son primordiales, pues para el resto de la población esto es sinónimo de enormes sacrificios. 

“Otra idea errónea que la gente tiene es que las personas fitness no comen nada ‘fat’, eso está mal. Las personas, cuando empiezan con este propósito, creen que ya jamás van a comer algo así y eso a su mente le crea mucha ansiedad”, expresó García Maldonado. 

Necesidades

Además de tomar la decisión de buscar un cambio y mejorar, se debe tomar en cuenta que cada quien es diferente, y a su vez, cada necesidad se presenta de distinta manera, es decir, no funciona el mismo sistema para todas las persona, Por eso, quien se planteé un nuevo estilo de vida, lo debe hacer tomando en cuenta sus habilidades, sobre todo, sus capacidades, pues los propósitos deben ser creíbles para ir cumpliéndolos poco a poco. 

“No es que no lo puedan alcanzar, solo que si una persona se conoce y sabe que le va a costar mucho, que se proponga bajar al mes unos tres kilos y cuando los logre bajar, eso le va a motivar para el siguiente mes”.

De esta manera y adquiriendo un nuevo estilo de vida paso a paso, la persona se irá acostumbrando a él y con el paso del tiempo será algo cotidiano que no representará ningún esfuerzo y sí muchos beneficios. 

Recomendación

Finalmente, el life coach manifestó que todo cambio debe ser pensado de forma permanente, con la finalidad de adquirirlo y adecuarlo al ritmo de vida de cada persona, ya que si bien la preocupación por establecer un cambio es específica, de manera general se debe tomar como un aliciente para mejorar en varios aspectos. 

“Todo parte de estos estilos de vida, tanto para el ejercicio como para ahorrar más o cambiar de trabajo, se debe generar poco a poco ese cambio”, concluyó.