Da el mejor comienzo

Desde 1992, la Organización Mundial de la Salud y UNICEF promueven y celebran la Semana Mundial de la Lactancia Materna, que tiene como objetivo la defensa de esta. Este año, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia replica el lema “¡Por el mejor futuro para nuestros hijos e hijas y el de nuestro planeta, da pecho!”, por lo que invita a continuar con esta actividad armónica y natural entre madres e hijos.

Así, del 1 al 7 de agosto, diversas actividades conmemoran la fecha que se enmarca por un 2020 sumido en una poderosa pandemia, la del COVID-19. Sin embargo, ninguna organización bajó la guardia ni los ánimos para promover la lactancia materna, la cual es la forma ideal de aportar a niños pequeños los nutrientes que necesitan para un crecimiento y desarrollo saludables.

Proceso

Definida como el proceso por el que la madre alimenta a su hijo recién nacido a través de sus senos, que segregan leche inmediatamente después del parto, la lactancia materna beneficia a la madre y al bebé en corto y largo plazo.

“Si todos los niños de 0 a 23 meses estuvieran amamantados de forma óptima, cada año se salvarían más de 820 mil niños de menos de 5 años”, asegura la Organización Mundial de la Salud (OMS) que, junto a UNICEF, recomiendan el inicio inmediato de la lactancia materna en la primera hora de vida.

Lo anterior obedece a que la leche materna es una fuente importante de energía y nutrientes para los niños de 6 a 23 meses. Puede aportar más de la mitad de las necesidades energéticas del niño entre los 6 y los 12 meses, y un tercio entre los 12 y los 24 meses.

En el largo plazo los niños y adolescentes que fueron amamantados tienen menos probabilidades de padecer enfermedades coronarias, sobrepeso u obesidad, entre otros beneficios. Además, existe una amplia evidencia científica que demuestra que una buena práctica de lactancia también protege la salud de las madres tanto a corto como a largo plazo.

En México

De acuerdo con la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID) 2018, en México la duración media de la lactancia materna es de 9.7 meses a nivel nacional, un incremento respecto a 2014 (8.8 meses).

La Academia Nacional de Medicina de México afirma que la leche materna es un fluido vivo, cambiante, desarrollado a través de millones de años de evolución que se adapta en función de las necesidades de cada etapa de la vida de los lactantes, por lo que protege su salud y estimula su óptimo desarrollo físico y mental.

Por ello, 2 de abril de 2014 se publicó en el Diario Oficial de la Federación el decreto por el cual se adicionaron y reformaron seis leyes para promover la leche materna como alimento exclusivo durante los primeros seis meses de vida y complementario hasta avanzado el segundo año.

Amenaza

En el marco de la pandemia por COVID-19, UNICEF resaltó los beneficios de la lactancia materna para el fortalecimiento del sistema inmunológico, haciendo un llamado urgente al gobierno y sociedad mexicana para promoverla y protegerla.

“Si algo debemos aprender de la actual pandemia es que un sólido sistema inmunológico es uno de los mejores legados que podemos darles a nuestros niños y niñas en su camino a la vida adulta,” resaltó Pressia Arifin-Cabo, Representante Adjunta de UNICEF en México.

“Sabemos que el 13% de las muertes en menores de cinco años podrían ser evitadas si la lactancia materna fuera practicada de forma óptima en contextos de emergencia, como la pandemia actual”.

“La leche materna es la primera vacuna que recibe un bebé y la mejor fuente de nutrición que puede darle su madre. Contiene anticuerpos y factores bioactivos clave que lo protegen de infecciones de todo tipo, incluidas las enfermedades respiratorias como COVID-19”, aseguró.

Finalmente, Arifin-Cabo recordó que la protección de la infancia es responsabilidad de toda la sociedad y apelando a familias, proveedores de servicios médicos, empleadores y responsables políticos a que estimulen y apoyen esta práctica, tan natural como vital para la salud y para el medio ambiente.

Lógralo con éxito

La Dra.Tania Fuentes, pediatra por la Universidad Veracruzana, comparte estos consejos para una lactancia materna eficaz:

1. Coloca tu mano en tu pecho en forma de C y dirígelo a la boca de tu bebé para provocar el reflejo de búsqueda.

2. Acerca el pezón rozando suavemente el labio superior e inferior en repetidas ocasiones.

3. De forma espontánea, el bebé abrirá grande su boca y podrás introducir el pezón y gran parte de la areola con un movimiento suave pero firme.

4. La parte inferior del pecho debe rozar su mentón.

5. Los labios deben mantenerse evertidos, es decir, hacia afuera, cubrir todo el pezón y la mayoría de la areola.

6. La lengua debe quedar sobre la encía para evitar que sufras algunas lesiones.