Celebra el Día de la Candelaria con los tamales mexicanos más populares

Los tamales mexicanos forman parte de una tradición muy latinoamericana. No solo comemos diferentes tipos de tamales en México, sino que existe una gran variedad de recetas que se elaboran en distintas latitudes para celebrar diferentes fechas especiales. 

Se estima que en México existen, al menos, 500 variedades de tamales, por lo que a continuación damos a conocer los más representativos de las diferentes regiones del país, mismos que no debes dejar de probar. 

Curiosidades

Antes del recorrido, no está de más compartir una serie de curiosidades sobre este delicioso platillo en todas sus versiones.

La palabra tamal viene de la palabra tamalli, que significa “envuelto” y se cree que surgieron en Mesoamérica entre el año 800 y 500 a.C.

Los mexicas elaboraban tamales con ingredientes bastante exóticos, como flamenco, ajolote, tuza, rana y conejo, entre otras especies. También los disfrutaban dulces, rellenos de frutas, con miel o calabaza.

Cabe destacar que las mujeres que sabían hacer tamales en la época prehispánica eran altamente apreciadas.

Existen más de 500 recetas de tamales mexicanos y tienen nombres muy característicos de su región, como los pibipollos, pulacles, chamicles, maneas, jacuané y pata de burro, entre muchos otros.

Ahora sí, conoce a detalle los tamales que lideran la lista de popularidad nacional: 

Corundas

Las corundas son conocidas por todo el occidente de México, tanto en Michoacán de donde son originarios, como en los estados de Jalisco y Colima. El uchepo es otro tamal típico de esta región y generalmente su sabor es dulce.

Oaxaqueños

Los tamales oaxaqueños están hechos de masa de maíz y envueltos generalmente en hoja de plátano y rellenos de cerdo o pollo con mole negro, pueden ser también de carne de iguana, rellenos de mole amarillo y chipilín.

Verdes o de mole

Los tamales verdes y de mole son de los más populares, especialmente en CDMX. Van envueltos en hoja de maíz y están rellenos de pollo con salsa verde o mole, de ahí su nombre. 

De chaya

Estos son típicos del sur y sureste de México. Campeche es uno de los lugares en los que son tradición: su preparación consiste en revolver la masa con la chaya, se rellenan con salsa de jitomate y pepitas de calabaza tostadas y molidas. 

También existe otra receta en la que los tamales de chaya se preparan con masa de maíz rellena de huevo duro. 

En Chiapas la masa se mezcla con manteca de cerdo y hojas de chaya picadas; en Tabasco la masa lleva hoja de chaya y chile amaxito y en Yucatán y Quintana Roo se sirve con chiltomate y, a veces, queso espolvoreado.

De chipilín

El chipilín es una planta silvestre que crece en ciertos lugares tropicales de Chiapas y su uso realza el sabor de los tamales que se preparan con suma delicadeza.

Las hojas de chipilín se mezclan con la masa de nixtamal, se les coloca la carne de pollo o el queso y finalmente se envuelve con sumo cuidado. 

Además de las hojas, este tamal suele rellenarse con queso y carne de pollo, y se envuelven con hojas de plátano, por lo que recuerdan un poco a los típicos tamales oaxaqueños.

Veracruzano

La masa del tamal veracruzano se elabora con granos de elote molidos con leche y se mezclan con manteca de cerdo derretida. Estos tamales se rellenan de carne de cerdo, mole de chile ancho y hojas de epazote.

Chanchamitos

La forma de estos tamales es lo que los diferencia de los demás: esta puede ser ovalada o esférica, además de que se amarran de ambos extremos de las hojas de maíz o plátano en las que se envuelven. 

Se preparan principalmente en Campeche, Yucatán, Veracruz y Tabasco, este último es el lugar en donde la masa se prepara con manteca de cerdo y caldo, además de que se colorea con achiote y se rellena con carne de cerdo o pollo sazonada con chile ancho, especias y epazote. 

En Yucatán se les conocer como chanchames y, en Veracruz, se les llama chanchan.

Zacahuil

El zacahuil también es conocido también como tamal de fiesta, propio de la región Huasteca.

Este tamal, que se prepara en una tina de metal, puede llegar a medir tres metros y pesar hasta 50 kilos. Se acompaña con chiles jalapeños, filetes de cebolla y rebanadas de zanahorias, todo esto encurtido en agua con vinagre y especias.