Elementos de la Marina construyeron un terraplén de más de un kilómetro de longitud, como parte de la primera etapa del dragado del río Agua Dulce.
Estos trabajos se realizarán a lo largo de siete kilómetros, que es la distancia por la cual cruza el caudal en la zona habitada, desde la carretera antigua Agua Dulce-Nanchital y hasta llegar a la desembocadura con el río Tonalá.
El ‘camino de tierra’ servirá para que el próximo jueves, decenas de camiones tipo volteo comiencen a retirar los millones de metros cúbicos de arena que fueron acumulándose en los últimos seis años cuando no se realizaron trabajos de desazolve.
La cantidad de tierra que tendrá que retirarse hasta el momento es incuantificable, pero en algunos sectores se levantan montículos que superan los cinco metros de altura.
Con el dragado del río se ampliará la capacidad de captación de agua, reduciéndose el riesgo de desbordamiento y evitar que dañen el patrimonio de los hidròmilos que viven en la zona baja y sobre la ribera.
Esta obra hidráulica que realiza el personal de la Marina es una realidad, luego que el alcalde José Noe Castillo Olvera lo gestionara ante el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien dispuso de los recursos y personal para que los trabajos iniciaran este mismo mes.
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