La tendencia de población ha mostrado un incremento de adultos mayores en el estado de Veracruz, esto de acuerdo con el Consejo Nacional de Población (Conapo). Pero las diferencias socioeconómicas son también visibles en la edad mayor o tercera edad, sobre todo en el caso de las mujeres, revelan informes. A esto hay que sumar la situación extraordinaria vivida en el último año y medio, es decir, la pandemia de COVID-19.
Veracruz es uno de los tres estados con más población adulta mayor y con proyecciones a incrementarse, refieren datos del Consejo Nacional de Población (Conapo).
Ante ello cobran fundamental importancia los esfuerzos como políticas públicas y apoyos como la pensión universal, ya que en muchos casos es el único ingreso de los adultos mayores, mientras que en otros casos fortalece su economía.
Las proyecciones de población del Conapo indicaban que del 2015 al 2019, el estado de Veracruz alcanzaría un monto poblacional de adultos mayores superior a un millón 53 mil, representando el 12.41% de la población total.
La población adulta mayor es considerada aquella de 60 años de edad, en adelante. De ahí que el Gobierno de Veracruz refiere, en su Programa de Atención a los Adultos Mayores”, que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud hay adultos mayores que se consideran disfuncionales debido a que, “a causa de los problemas naturales que conlleva el envejecimiento, necesitan ayuda para llevar a cabo sus actividades cotidianas. Además, las personas de la población de adultos mayores son más vulnerables a diversas enfermedades y por lo tanto requieren una constante observación y atención médica”.
En abril del 2018, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) propuso generar una nueva cultura del envejecimiento, establecer acciones y programas con enfoque de derechos humanos, con el fin de promover la revaloración y participación activa de las personas mayores y superar el estereotipo que las considera receptoras pasivas de ayuda.
DOS CARAS DE LA MONEDA
La Comisión Nacional de Derechos Humanos advierte que México muestra las dos caras de la vejez y el envejecimiento, ya que por un lado hay aproximadamente 1.7 millones de personas mayores víctimas de violencia física y psicológicas, 40% de las cuales la padecen en sus propios hogares, quienes gastan mensualmente el 40% de sus pensiones en médicos especialistas; mientras que en contraste también hay personas mayores que representan una expresión participativa, empoderada, conocedora y defensora de sus derechos humanos, que impulsan la resignación de la vejez y el envejecimiento para cambiar los estereotipos negativos hacia una concepción de dignidad, mediante el ejercicio pleno de sus libertades y derechos fundamentales, hacia una vida libre de violencia, con igualdad de género y muy alejada de la pobreza y la discriminación.
POBLACIÓN ADULTA MAYOR CRECE ACELERADAMENTE
De acuerdo con información del Gobierno Federal, la composición de la población en México ha cambiado en las últimas décadas. En 2015, la población adulta mayor (60 años y más) representaba 10.9% del total de la población femenina y 9.9 del total de población masculina.
Sin embargo, “la población adulta mayor está creciendo de manera acelerada. Se prevé que para 2030 las mujeres de 60 años y más representen 15.8% del total de población femenina y los hombres 13.8% del total de población masculina”, esto de acuerdo con proyecciones del Consejo Nacional de Población.
La Ciudad de México, Oaxaca y Veracruz reportaron la mayor concentración de personas adultas mayores.
SALUD Y FALTA DE ACCESO A ELLA
El Gobierno de México refiere que, en el aspecto del acceso a los servicios de salud, el 39% y 9% de la población de personas adultas mayores son derechohabientes del IMSS y del ISSSTE respectivamente, mientras que el 27% no tiene ninguna derechohabiencia.
Al respecto, el Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (Inapam) señala que las enfermedades más frecuentes en las personas adultas mayores son: enfermedades del corazón 25%, hipertensión arterial 22%, diabetes mellitus 15.9%, tumores malignos 12.2%, enfermedades cerebrovasculares 7.3%, enfermedades pulmonares 5.1%, enfermedades del hígado 3.9%, influenza y neumonía 3%, insuficiencia renal 2.2% y desnutrición 1.8%.
PANDEMIA AFECTÓ DRÁSTICAMENTE A PERSONAS ADULTAS MAYORES
De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la pandemia de COVID-19 que aún prevalece, “ha afectado de manera desproporcionada a la población de adultos mayores.
Y es que La pandemia de la COVID-19 ha resaltado las necesidades y las vulnerabilidades que tienen las personas mayores con respecto a su derecho a la salud, evidenciado las tasas de mortalidad más altas en personas mayores con comorbilidades y con deterioro funcional; y expuesto la fragilidad de los sistemas de salud para apoyar a los adultos mayores y considerar sus necesidades únicas, entre otras, advirtió la OPS.
Es por ello que ante la pandemia de COVID-19 representa un desafío para un abordaje diferente e intervenciones adecuadas a los adultos mayores, que considera la diversidad de estados funcionales y características de salud de esta población.
MUJERES ADULTAS MAYORES
Información pública del Gobierno de México en relación a las personas adultas mayores, refiere que “las personas adultas mayores en general, y las mujeres de edad en particular, no desempeñan un rol activo en los asuntos políticos, por lo cual existe una baja acción en materia de defensa de sus demandas por el acceso equitativo a oportunidades de empleo, educación y ocupación de espacios centrales antes que marginales en las actividades de la sociedad civil. Las mujeres de la tercera edad generalmente, cuando tienen capacidad física se hacen cargo del cuidado de la familia, como son los nietos y nietas entre otros por lo que es difícil que se desarrollen en otras actividades”.
Los datos aluden que la inequidad que aún se vive en el país, entre hombres y mujeres, afecta a las adultas mayores, esto porque hay mujeres que actualmente tienen más de 60 años, que se han enfrentado a falta de educación escolar, falta de acceso a la salud, falta de participación económicamente activa, lo cual las coloca en condición de vulnerabilidad en torno a su falta de conocimientos para defensa de derechos, así como falta de ingresos. Esa situación empeora en las zonas rurales.
LA PENSIÓN PARA ADULTOS MAYORES EN VERACRUZ Y MÉXICO
Ante la inequidad que ha imperado en el país a lo largo de la historia, lo cual se refleja en temas como acceso a una atención digna de salud, acceso a buena alimentación, a vivienda digna, a una vejez digna, actualmente el Gobierno de México instruyó otorgar pensión universal a las personas mayores de 65 años en todo México, misma que consiste en 3 mil 100 pesos de manera bimestral.
La pensión ha sido elevada a rango Constitucional para garantizar que, independientemente de nivel de estudios o ingresos, las personas en la tercera edad reciban de parte del gobierno del país, una cantidad económica que contribuya a su capacidad económica para sostenerse de manera digna.
De acuerdo con lo expuesto por el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien instruyó la mencionada pensión universal para las personas adultas mayores, se espera que el monto de la pensión vaya incrementando hasta alcanzar los 6 mil pesos bimestrales para el fin de su sexenio en 2024.
Para agosto de 2021, de acuerdo con el delegado de Programas para el Desarrollo, de la Secretaría del Bienestar, en el estado de Veracruz, Manuel Huerta Ladrón de Guevara, en el estado de Veracruz se atendía con beneficio de la pensión universal a más de 655 mil personas. A esta cifra de suman las personas que, a partir de agosto, de manera gradual están siendo incorporadas para recibir el beneficio de la pensión, y de 65 años en adelante, por lo que actualmente ya son más de 700 mil las personas mayores de 65 años que reciben pensión universal establecida por el presidente López Obrador.
Sin embargo, el tema de la tercera edad es profundo y complejo. En la tercera edad son distintas las necesidades que cada persona enfrenta, sobre todo en temas de salud y acceso a una atención digna, así como solvencia económica. La tercera edad refleja, en todos sentidos, la vida que se ha tenido por más de 60 años, en algunos casos siendo prolífera y estable, pero en otros muchos: una vida de trabajo en exceso, de falta de acceso a atención digna de salud, de salarios precarios, de enfermedades, de falta de oportunidad para estudiar, entre otros factores. En zonas rurales y pobres de Veracruz y de México, como en el resto del mundo, la situación suele ser más drástica, y más en el caso de las mujeres.
DÍA INTERNACIONAL DE ADULTOS MAYORES
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) designó el 1 de octubre como “Día Internacional de las Personas Adultas Mayores”, también llamadas “Personas de Edad”.
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