Centro de transferencia 'de la discordia', rechazado en Amatlán por costo ambiental

Amatlán de los Reyes, un pueblo en medio de una región idílica, se encuentra en medio de una batalla ambiental que ha despertado la indignación de sus habitantes y ambientalistas. El proyecto del centro de transferencia propuesto para la zona ha desencadenado un profundo descontento en la comunidad.

Bajo el movimiento "No al Basurero", los ciudadanos han expresado su preocupación por la cercanía del centro de transferencia con la población, las escuelas, el pozo de agua potable y el arroyo Quimiapa. La falta de consulta y de información sobre el proyecto ha sido considerada una violación a sus derechos humanos.

La presentación del proyecto por parte de los secretarios de Sedema y PMA ha generado aún más indignación. A pesar de mostrar un video del supuesto centro de transferencia, se descubrió que ya había sido presentado en una reunión en Penjamo sin una convocatoria oficial para la población. 

Además, la Secretaría de Medio Ambiente no ha emitido los permisos necesarios para su construcción en el ejido San Miguelito, la ubicación oficial.

Incluso las autoridades locales han expresado su descontento, aseguró el movimiento "No al Basurero". El procurador del Medio Ambiente ha afirmado que no impondrán nada y ha propuesto una próxima reunión convocada por la Secretaría del Medio Ambiente y la Procuraduría del Medio Ambiente. 

Mientras tanto, el alcalde de Amatlán ha declarado que no ha sido informado sobre este centro de transferencia, y el gobierno de Córdoba asegura poseer el terreno a pesar de la falta de autorización.

Ante esta situación, el movimiento "No al Basurero" ha instado al gobierno de Amatlán de los Reyes a establecer un diálogo y encontrar una solución. La comunidad defiende que el diálogo, el respeto y la disposición de las autoridades para escuchar a los ciudadanos son fundamentales en este proceso. En medio de esta batalla por un entorno seguro, los habitantes de Amatlán se mantienen firmes en su defensa.