El Primer Tribunal Colegiado en Materia Administrativa ordenó restituir a Gladys Pérez Maldonado como magistrada en el Tribunal Superior de Justicia, y con ello echar abajo el nombramiento que hiciera en su momento el Congreso local de la abogada Alma Rosa Flores Ceballos.
Tras más de un año de litigio, la exmagistrada y ahora sí ratificada por la justicia federal, Gladys Pérez Maldonado, promovió un juicio de amparo al considerar que se le habían violado sus derechos constitucionales al ser discriminada para poder ser ratificada en dicho cargo por parte de los diputados locales.
Los magistrados federales expusieron que en este nuevo yerro por parte del Congreso local emitieron un acuerdo de no ratificar a la quejosa como Magistrada del Poder Judicial del Estado, sin un sustento en los elementos valorados por ese órgano legislativo para tal fin.
Al haber resultado insuficientes para demostrar que no es idónea para continuar en ese cargo por un segundo período y así destruir la presunción de aptitud que impera a favor de la Magistrada para ser ratificada, después de culminar su primer período de diez años, al no acreditarse elementos desfavorables relevantes en el desempeño de su encomienda que ameriten no ratificarla, se le concede la protección de la justicia”.
Bajo esta tesitura, por unanimidad los magistrados del Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Séptimo Circuito con sede en Boca del Río fallaron a favor de la protección de la magistrada Gladys Pérez Maldonado, quien deberá ser restituida en el cargo.
Con ello, podrá volver a la sala que tenía asignada, además de que deberán pagarle los salarios caídos mientras fue separada de su cargo.
Al mismo tiempo deberán dejar sin efecto el nombramiento de Alma Rosa Flores Ceballos, quien se venía desempeñando como magistrada y que había sido nombrada en el cargo por 10 años por la pasada Legislatura.
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