Siempre hay procesos judiciales, si es que ese fuera el caso, que deben de ser respetados en un verdadero estado de derecho, sin extra limitación de las funciones y concediendo, en apego a los derechos humanos, las condiciones necesarias que hablen de respeto a los derechos humanos, las familias y con ello evitar excesos o vacíos, informó el vocero de la Diócesis de Orizaba, Helkyn Enríquez Báez.
Esto tras la detención de siete personas de esta ciudad, de las cuales en un primer momento se informó que habían sido privadas ilegalmente de su libertad de un negocio por hombres armados.
"Necesitan ser informados de la situación y el estado jurídico de las personas, entonces esperemos que no sea un exceso sino que sea todo de modo claro para evitar malas interpretaciones".
Cómo es de recordarse Moisés de 17 años de edad, estudiante de preparatoria ya fue liberado, sin embargo sigue detenido su hermano con las otras personas ya que ahora se les imputan delitos de ultrajes a la autoridad con piedras según el Juez de Control; determinación que dista de las declaraciones que en un primer momento dio a conocer el Gobernador de Veracruz que aseguraba que habían sido detenidos por portar armas de fuego exclusivas del ejército, drogas y haberse enfrentado con elementos de Seguridad Pública en un camino de terracería en el municipio de Fortín de las Flores.
En cuanto al tema de la reincorporación de la Policía Municipal de Orizaba, Enríquez Báez regresaron a sus funciones todos aquellos que cumplieron con sus exámenes destacando es loable reconocer su desempeño cuando dan los resultados.
"En primer lugar por una justicia laboral, no se puede alguien quitarle su fuente de trabajo; segundo, por un clamor social la ciudad de Orizaba exigían mayor seguridad ante los delitos que se incrementaron con la ausencia de la Policía Municipal; en tercer lugar porque es justicia reconocer cuando alguien está haciendo las cosas bien".
Luego de que durante esta semana fueron abandonados restos humanos en los municipios de Río Blanco y Zongolica, el vocero diocesano admitió que en el estado de Veracruz la violencia es evidente y cada vez de manera más exacerbadas por lo que es necesario que se sigan implementando las medidas necesarias para restablecer la paz y combatir la delincuencia haciendo siempre a un lado los intereses político-electorales, confiando en que pronto las instituciones de seguridad puedan devolver al estado y a la región, la paz que los ciudadanos exigen.
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