En la congragación de Tonalá, las intensas lluvias que han prevalecido desde la semana pasada, mantienen paralizado al sector pesquero y con ello más de dos mil pescadores sin ingresos económicos para mantener a sus familias.
La interacción del frente frío 4 y la onda tropical 37 dejó lluvias que alcanzaron los 150 milímetros, lo que obligó a los hombres del mar a tener que amarrar sus embarcaciones en la costa hasta el paso del fenómeno hidrometeorológico.
Esto provocó que no tengan ingresos para solventar la manutención de su familia, por lo que a traviesan por una severa crisis que los desesperan más aún con los gastos del regreso a clases presenciales.
Durante el periodo de inactividad en el Golfo de México, los hombres y mujeres expertos en las artes de pesca, realizan diversas tareas en tierra, como desenredar sus redes, actividad que pueden tardar hasta cuatro horas de pie y bajo los intensos rayos del sol.
Estas redes pueden tener un diámetro de hasta 300 metros las cuales se enredan con la fuerza de la corriente, por lo que tienen que ser hasta cuatro personas las que la desaten.
Este sector espera que las condiciones climatológicas mejoren para poder conseguir una buena pesca, que ayude a cubrir las necesidades básicas de su familia.
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