Al menos mil 500 personas salieron a marchar a las calles para exigir justicia y castigo a los responsable por el homicidio del joven Brando de Jesús Arellano Cruz, quien fue asesinado luego de ser perseguido por policías municipales de Lerdo de Tejada el pasado viernes.
La marcha fue convocada en redes sociales para este lunes 22 de enero. En punto de las 17:00 horas pobladores comenzaron a reunirse en la colonia San Pedro de la avenida Independencia, para partir con destino al Palacio Municipal.
Previo a la marcha, los participantes aclararon que no permitirían que en la caminata estuviera ninguna persona que buscara algún beneficio político.
La vestimenta fue blanca, con cartulinas y veladoras encendidas para honrar la memoria del joven de 27 años, quien al momento de ser asesinado era padre de dos hijos, una niña de un año y nueve meses y un niño de siete años.
Al frente de la marcha los padres de Brando, Ericka Cruz y Delfino Arellano, que portaban fotografías con su hijo. Minutos más tarde, el padre del joven exigió -frente al Palacio Municipal custodiado por Policías Estatales y elementos de la Guardia Nacional- un apoyo compensatorio del gobierno para sus nietos que quedaron huérfanos.
La manifestación se dirigió sobre la avenida Independencia hasta llegar a la carretera libre federal 180, para después ingresar al centro de la ciudad hasta el Palacio Municipal.
En el trayecto, más personas se fueron sumando a la marcha, en todo momento se mantuvo un silencio que eventualmente era interrumpido por personas que desde las banquetas levantaban veladoras y gritaban por justicia.
Al llegar al Parque Central, los elementos de la Guardia Nacional se concentraron frente al Palacio Municipal. El contingente pasó de largo y en el teatro al aire libre dieron la voz a los padres de Brando.
Erika Cruz agradeció el acompañamiento y la exigencia de justicia de los pobladores de Lerdo de Tejada y lanzó el llamado al gobierno para que exista justicia y castigo a los responsables por el crimen.
El padre de Brando compartió lo que su hijo le narró minutos antes de que ser privado de la vida. El joven se comunicó por teléfono para avisar que era seguido por policías municipales y no entendía el motivo.
Se dirigió a casa de su abuela en donde después de apagar el motor, recibió dos balazos desde la patrulla en la que viajaban cinco policías municipales, cuatro se ellos fueron detenidos el mismo viernes y este lunes se confirmó que fueron imputados por su homicidio.
Delfino Arellano afirmó que el dolor que vive la familia continúa, pero la exigencia de justicia no parará hasta que se ejerza un castigo a los responsables, para que se garantice que no ocurrirá de nuevo.
Nosotros | Publicidad | Suscripciones | Contacto | Aviso de Privacidad
Reservados todos los derechos 2024 |