La entrada de miel adulterada proveniente de China ha afectado al mercado nacional, aunque la pandemia provocó que se restringiera el ingreso de ese producto y esto permitió un repunte de ventas, indicó Rogelio Sánchez, apicultor y médico veterinario.
“Tenemos un problema que es a nivel mundial por la producción de mieles adulteradas en el mercado chino, pero como ahora se paró mucho lo que es la comercialización de esos productos por la pandemia, el producto local tuvo un repunte”, comentó.
Aunado a ello, abundó, como el problema que genera el COVID-19 está asociado a problemas respiratorios, muchas personas están comprando la miel.
Destacó que el único producto que no se importa en el país es la miel, de ahí en fuera todo lo demás se introduce en grandes cantidades.
A pesar de ello, señaló que el consumo de ésta en México es muy baja, pues se tiene un estimado per cápita de 170 miligramos al año cuando en el mercado europeo se consume más de un litro y el alemán al menos dos.
El apicultor mencionó que las producciones de miel han disminuido, tanto por el cambio climático como por deforestación y el uso de herbicidas, plaguicidas y otros productos que acaban con las colmenas.
Señaló que depende del tipo de producto del que se trate y su concentración, lo que llega a afectar a este insecto.
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