Los productores de leche son los más afectados debido a los constantes apagones que ocurren en las comunidades rurales del municipio de Las Choapas.
Las variaciones en la distribución de la energía en ejidos como Rio Playas y Cerro de Nanchital, ya provocó pérdidas económicas a las familias, debido que los refrigeradores dejan de funcionar por varios días, echándoseles a perder diversos alimentos.
Lo mismo ocurre a por lo menos una docena de ganaderos dedicados a la ordeña de lecha, debido que los litros que destinan para la distribución al menudeo, no puede almacenarse para otras comunidades, ni tampoco utilizar el sistema mecanizado de ordeña.
A pesar que en los ejidos se mantienen varias actividades productivas que es el sustento de centenares de familias, el suministro de luz falla casi todos los días y la atención al desperfecto por parte de la CFE es tardía.
Gregorio Gómez, ordeñador con más de 15 años en el giro, aseveró que son incalculables las pérdidas monetarias provocadas por el pésimo servicio.
Los afectados, consideraron que por la pandemia del covid-19, no han podido reunirse todos los afectados, pero pese a ello, organizan una manifestación pacífica en las oficinas de la ex paraestatal eléctrica, para que revisen sus líneas de distribución y eviten que continúen las variaciones eléctricas.
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