“Polvo eres y en polvo te convertirás”, es la frase que comúnmente se escucha al recibir la ceniza que es impuesta este día que marca el inicio de la Cuaresma.
El Miércoles de Ceniza es una de las tradiciones más sagradas de la Iglesia católica, que viene acompañada de varias curiosidades y rituales.
A partir de hoy inicia la cuenta para la Semana Santa, un periodo de 40 días en el cual se invita a la feligresía a realizar los preparativos para la celebración de la Pascua.
La tradición de imponer la ceniza se remonta a la Iglesia primitiva. En aquel entonces las personas se colocaban ceniza en la cabeza y se presentaban ante la comunidad con un "hábito penitencial" para recibir el Sacramento de la Reconciliación el Jueves Santo.
La Cuaresma adquirió un sentido penitencial para todos los cristianos casi 400 años D.C. y a partir del siglo XI, la Iglesia en Roma impone las cenizas al inicio de este tiempo.
De acuerdo con al Vaticano, en el siglo XII surgió la costumbre de obtener las cenizas al quemar los ramos de olivo bendecidos el Domingo de Ramos del año anterior.
Las palmas que fueron bendecidas en la celebración, son rociadas con agua bendita, para posteriormente ser aromatizadas con incienso y posteriormente quemarlas para poder imponerlas a los feligreses.
El Miércoles de Ceniza es el primer día de Cuaresma en el calendario litúrgico católico.
Al recibir la ceniza, las frases que comúnmente se escuchan son “arrepiéntete y cree en el Evangelio”, así como “Acuérdate que eres polvo y en polvo te convertirás”, textos extraídos de pasajes de la Biblia.
Muchos se preguntan si después de terminada la celebración se puede retirar la ceniza, no hay alguna regla para esto, sin embargo, se acostumbra entre la población no retirarla y esperar a que se caiga sola.
Con la celebración del Miércoles de Ceniza, da por iniciada la Cuaresma, un tiempo litúrgico que se centra en tres pilares espirituales según la Iglesia católica: la oración, el ayuno y la limosna.
Se exhorta a los fieles creyentes a realizar actos de caridad y hacer lo que esté al alcance para lograr una buena preparación para la gran fiesta del Domingo de Pascua.
Así como los deportistas se preparan para sus competencias, con la firme intención de ganar; así pues, los católicos se alistan para la Semana Santa.
Es por ello que recurren a la oración, ayuno y limosna, para vivir un tiempo de reconciliación. Es considerado un periodo de crecimiento personal y espiritual.
Es considerado un día santo cristiano de oración y ayuno.
El ayuno que se realiza el Miércoles de Ceniza y el Viernes Santo consiste en realizar una sola comida fuerte durante el día, mientras que la abstinencia consiste en no comer carne.
Entre los alimentos que no se deben consumir durante estos días están la carne de cerdo, ternera, cordero y cabrito.
¿Quiénes deben realizar ayuno?
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