Inflación y guerra entre Rusia y Ucrania afectan a cafeticultores veracruzanos

La inflación que se ha presentado en México, así como el conflicto entre Rusia y Ucrania, ya comienzan a afectar al campo veracruzano; las exportaciones han disminuido y los precios de productos como fertilizantes se han multiplicado.

De acuerdo con Margarita Pimentel González, cafeticultora de la zona de Tezonapa, en la región centro del estado de Veracruz, el campo ya está sufriendo los estragos de la inflación.

Y es que el costo de los insumos para mantener el campo continúa creciendo, lo que ha ocasionado un aumento en el precio final debido a la oferta y la demanda; sin embargo, precisó que esto no los ha frenado al cien por ciento.

“Nos está afectando toda la inflación que hay ahorita. No nos hemos detenido en el trabajo del café… poco o mucho, pero seguimos”, señaló.

En días pasados, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reveló que la inflación general anual se ubicó en 7.88 por ciento durante la primera quincena de junio, un nivel que no se veía en más de 20 años.

No obstante, la inflación no es lo único que ha afectado a los cafeticultores veracruzanos.

Guerra en Ucrania bloquea llegada de fertilizantes

El conflicto bélico que se desarrolla en Ucrania, tras la invasión de Rusia en febrero de este año, ha ocasionado la detención de las importaciones y exportaciones desde y hacia esa zona.

Al ser Rusia el principal proveedor de fertilizantes para el campo en México, la detención de sus fletes marinos ha provocado una escasez de este insumo, lo que se ha traducido en un encarecimiento del producto.

Actualmente, el fertilizante ya oscila los 24 mil pesos por tonelada, cuando hace un año se ofertaba en 8 mil pesos, es decir, tuvo un aumento del 187 por ciento en el precio, un alza que representa una menor rentabilidad para los agricultores, así como incrementos para el consumidor final.

Debido a ello, en fechas pasadas agrupaciones de cafeticultores veracruzanos enviaron una carta al Gobierno federal, para ser incluidos en un plan de subsidios, pues este y otros insumos ya se han vuelto incosteables.