A casi dos años de permanecer cerrados los cementerios por la pandemia del Covid-19, las tumbas del panteón municipal están sucias y deterioradas, incluso, en algunas solo se puede observa las cruces debido a la crecida maleza.
Durante éste periodo, el gobierno municipal no suspendió los trabajos de limpieza y mantenimiento general, sin embargo el cuidado de las tumbas es responsabilidad de los familiares del fallecido.
De las cinco mil sepulturas que hay en el panteón municipal, se calcula que alrededor del 60% no recibió mantenimiento durante los últimos 23 meses.
Lo anterior, provocó que centenares de tumbas se encuentren rodeadas de cascajo y basura, además que las figuras religiosas ya se están despintando.
A diferencias del año anterior, se observa más actividad en este camposanto, tanto de parte de la ciudadanía, como de los trabajadores del gobierno y hasta de particulares, quienes han iniciado los trabajos de pintura y rehabilitación de tumbas.
Incluso, estas actividades están generando fuentes de empleo temporales, donde pueden ganar de entre 200 y hasta 400 pesos, dependiendo de los trabajos que se tengan que realizar.
En lo que respecta al cementerio municipal, está siendo abierto por la mañana, para que el personal de limpieza y familiares de los fallecidos, puedan limpiar las tumbas luego de varios meses de no hacerlo.
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