‘El Viejo’ sigue siendo una tradición que perdura en el estado de Veracruz, en vísperas del fin de año, jóvenes y adultos vestidos de mujer bailan y festejan la llegada del 2022.
Su origen data del siglo XIX en el puerto de Veracruz, cuando un líder obrero acudió a la casa de sus patrones a pedir más apoyo por el cierre del año, pero con el paso del tiempo diversos sectores del estado han representado de formas distintas el pedir apoyo económico para comprar ‘cuetes’ o la cena del 31 de diciembre.
En Agua Dulce son las familias de las colonias populares, quienes bailan ‘pegajosas’ canciones en medio de las calles para que los automovilistas y peatones les brinden unas monedas.
Este lunes, en la esquina que forman las calles Hernández Ochoa y Miguel Hidalgo de la colonia Nueva del Río, la familia Santiago Castro, como desde hace varios años, salió a bailar con el viejo.
Miembros de esa familia, agarran a una botarga elaborada con ropa llena de papel que simulan ser el año 2021 y que será quemado durante los últimos minutos del 31 de diciembre.
Es una pequeña bocina se esculla el estribillo “Una limosna, para este pobre viejo”, al mismo tiempo que los hombres de la casa bailan con vestidos largos y hasta maquillados.
Esta tradición forma parte de la cultura popular de Veracruz, que se niega a ser olvidada por los jarochos quienes con sus bailes, cantos y diversión la siguen preservando.
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