La contingencia por COVID-19 afectó el traslado de los cuerpos de veracruzanos muertos en otros estados del país durante la pandemia. Incluso en casos no relacionados con coronavirus. Se tiene al menos dos reportes recientes de migrantes locales que murieron en Tamaulipas y en Baja California Norte, en la frontera con Estados Unidos, y en uno de éstos se tuvo que recurrir a la inhumación.
Las medidas del gobierno de Donald Trump en relación al COVID-19 han agudizado la problemática de la región fronteriza y generados trastornos a la región en el plano económico, salud, social y hasta en las relaciones familiares interpersonales de quienes habitan en ambos lados de la frontera.
“Atendimos (el caso de un veracruzano) que murió en Tijuana, no precisamente por COVID-19. Pero Tijuana dijo ‘no permito el paso del cuerpo porque hay cierta duda por la zona en que murió”, reveló Carlos Enrique Escalante, director General de Atención a Migrantes.
El migrante de Veracruz presentaba fiebre y tos, pero no se confirmó que la sintomatología correspondiera a coronavirus.
"Entonces, como empezaron a retardar tanto el traslado del cuerpo, la familia decidió que fuera inhumado allá. No fue cremado, fue inhumado en Tijuana", expuso Carlos Enrique Escalante.
Las muertes diarias por causa directa de COVID-19 en Baja California subió a 8.3 desde que inició la pandemia, según el secretario de Salud, Alonso Pérez Rico.
Hasta el momento la entidad acumula 610 defunciones por coronavirus mismas que se concentran en su mayoría en Tijuana con 423; Mexicali 133: Ensenada 23: Tecate 20; Rosarito 7; San Quintín 3 y San Felipe 1.
“Hubo otro caso en Matamoros, Tamaulipas. En el caso de Matamoros sí se logró que viniera el cuerpo (a Veracruz)”.
El flujo de migrantes veracruzanos a la frontera norte y a Estados Unidos históricamente ha sido alto. A consecuencia de la pandemia de COVID-19, el Gobierno del Estado cuenta con el reporte de al menos 17 muertes de veracruzanos en Estados Unidos, pero la cifra podría ser aun mayor.
Los veracruzanos fallecidos eran originarios de los municipios ubicados en la zona centro, particularmente Fortín, Misantla, Córdoba y la zona aledaña a Playa Vicente, reveló Carlos Enrique Escalante.
Los oriundos de Veracruz radicaban en su mayoría en Nueva York y aunque se ha efectuado la solicitud para repatriar sus cuerpos, ninguno ha podido ser traído a la entidad debido a las políticas sanitarias impuestas ante la contingencia por el gobierno de Donald Trump.
El Gobierno de Donald Trump no permite que los cuerpos de los veracruzanos sean trasladados a su lugar. Incluso en este tipo de decesos había ordenado que fueran cremados.
“Eso nos genera problemas con nuestros veracruzanos porque nuestra costumbre no es cremar, sino es inhumación. Entonces hemos tenido mucho problema con ello. No nos están dejando pasar los cuerpos”.
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