Crece actividad industrial en México, en un panorama incierto en 2023

Aun cuando la actividad industrial de México registró en el pasado mes de febrero su mejor resultado desde diciembre del 2021, aún enfrenta un panorama retador en este 2023.

De acuerdo con datos desestacionalizados del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la producción industrial de México creció 0.73 por ciento a tasa mensual en febrero pasado, que significó el mayor nivel en los últimos 14 meses.

Mientras a tasa anual, el aumento fue de 3.5 por ciento, variación que supera los registros de los últimos cinco meses. No obstante, la cifra resulta aún incierta, pues la gran mayoría de los subsectores tuvieron un desempeño más pasivo.

Y es que el principal aumento que fue de 8.45 por ciento mensual en las obras de ingeniería civil y de 11.29 por ciento en los servicios relacionados con la minería.

Aunado a ello, el común denominador de los subsectores referidos es que dependen en gran medida del ejercicio de recursos del presupuesto federal.

Sectores con pérdidas

En contraparte, el grupo financiero añade que los elementos más vinculados al ciclo económico, como la edificación (-1.93 por ciento mensual) o las manufacturas (-0.47 por ciento), tuvieron pérdidas, “por lo que el panorama general para la industria sigue siendo retador”.

Sin embargo, de los cuatro sectores que integran a la industria mexicana, dos presentaron reducciones en sus niveles de producción durante febrero de este año: manufactura (0.47 por ciento) y construcción (0.24 por ciento).

Sobre las manufacturas, que es el sector más importante de la economía mexicana, 14 de 21 ramas se contrajeron en febrero, destacando enseres domésticos (10.8 por ciento), maquinaria y equipo (3.9 por ciento) y equipo de cómputo y comunicaciones (2.3 por ciento); estas actividades se vinculan a la demanda externa.

Por otro lado, se destaca que la baja de 9.1 por ciento mensual en la fabricación de productos derivados del petróleo, como la gasolina, avisa de un entorno adverso para el sector energético y posibles implicaciones para la demanda interna de sostenerse la tendencia.