La SIOP tiene que aclarar las obras mal hechas que hicieron constructoras emanadas del dedazo y que además se dan el lujo de subarrendar la construcción, uno de los casos más frescos que hay, es la carretera que va al Cerro de Nanchital, la cual desde el día 15 de junio que cayó un torrencial aguacero salió a flote la mala calidad que existe, Elio Hernández titular de esa dependencia se quiere zafar con “hay, mamá que yo no fui, yo te aseguro que yo no fui”.
¿Por qué siguen utilizando los mismos patrones de los pasados gobiernos?, los cuales contrataban empresas fuereñas y estas arrendaban las obras o cobraban anticipo, raspaban la carretera y se iban muy campantes a otra parte; no se vale que aun con todos los señalamientos que existen y las raterías del pasado, se siga cayendo en el mismo esquema, no es necesario traer gente de afuera, cuando aquí ni trabajo tienen las constructoras, con esto los ayudarían a que reactivara la economía de la región.
En el sur hay buenas empresas
Two.- Existen buenos constructores, quienes inclusive viven y tienen sus negocios en el Sur, quienes pueden hacer cualquier obra y de quedar mal, se les podrían jalar o ir a tocarles su puerta y reclamar las cochinadas que hicieran; lo que pasó en Las Choapas, más claro ni el agua, brotó la podredumbre de la influencia y le dieron obra a los de Konecta, 100 por ciento poblana, empresa que está más quemada que un horno de pan. Estos poblanitos cuentan con un expediente bastante nefasto por sus malos antecedentes y trabajos pauperrimos, una de sus especialidades es hacer traspasos de obras y ganarse la lana, sin meter un solo dedo al proyecto, este arreglo fue el que hicieron con el senador de MORENA Pedro Miguel Haces Barbas, quien movió mar y tierra para que sus agremiados de la CATEM construyeran esa fatal obra.
Fuentes señalaron que los poblanos una vez caído el moche, volaron y que ahorita de los 40 kilómetros de carretera que tenían que hacer ni se acuerdan. Elio Hernández, el mero mero de la SIOP, dice que él no tiene ningún pecado; entonces, ¿Quién trajo a los poblanos de nueva cuenta a esas oficinas y le dio de primera instancia la obra de 70 millones de pesos? ¿Quién la arrendo? mocharon el tremendo billetón sin despeinarse; hay corrupción ¿O es mi imaginación?, ¡No jueguen! ni para donde hacerse.
No hay excusa que valga; es muy lamentable que a estas alturas se sigan las mismas mañas de los pasados gobiernos, las obras se las siguen otorgando a sus cuates, recomendados y estos solo ponen saliva y traspasan las obras, les cae el billete y se van. Pregunta: ¿Cuántos millones se llevó KONECTA? ¿Cuántos ampones tapados hay? ¿Cuántas obras hay con ese mismo rango? No se pasen de galleta.
El hijo pródigo del Cerro de Nanchital
Three.- Esteban Ramírez Zepeta, el hijo pródigo del Cerro de Nanchital, con esta obra de la carretera, pretendía limpiar su desgastada imagen en Las Choapas, por aquello del nepotismo que hizo con sus familiares a quienes colocó en los cargos de alcurnia cuando fue secretario particular del gobernador, esponjado el mozalbete pues pretende ser candidato en ese municipio; pero con este asunto de la podredumbre que brotó en ese tramo de los 40 kilómetros de la carretera pues no la tiene tan fácil y su baño de pureza se le cayó, ahora tendrá que ver cómo va a salir librado de este paquete de corrupción en el que dicen está hasta el cuello.
Hay que señalar por aquello del ‘no te entumas’, que no tenemos nada en contra de Ramírez Zepeta, ni con colaboradores cercanos al poder, donde algunos se sienten bordados a manos y se les olvidó aquello de la humildad; no alucinen e inventen que la prensa les tiene mala voluntad y que los trae de encargo, mijitos, ustedes solitos se meten en los líos, no es necesario que alguien los empuje, por eso lo mejor que podrían hacer, es portarse bien, están en una posición privilegiada y en el blanco como figuras de feria, por eso no deberían andar causando tantos problemas estúpidos, chambéele sin hacer escándalo; no aprendieron nada de quien está en la silla bendita del gobierno del Estado, sencillito y humilde, por eso no es justo que los enanos le crezcan alrededor.
Otra cosa la carretera del Cerro de Nanchital, sin defender a nadie; como pretenden que la CATEM, hubiera hecho una rehabilitación de calidad del concreto hidráulico, rellenos, cunetas, en fin, cuando de entrada Konecta, con el chasquido de los dedos, les quito un jugoso porcentaje de los 70 millones que costó la carretera, es muy descarado el hecho. Con este tipo de acciones queda demostrado que el enemigo está adentro, aquí, en China, Japón, es corrupción, si dan obras al dedazo que las realicen, lo que dice el presidente López Obrador, se lo pasan por el arco del triunfo, no más influyentísimos, no moches e intermediarios.
Nada que ver con los ciudadano de Santo Domingo Xagacía, en Oaxaca, al concluir el camino rural, le regresaron al presidente 267 mil 340 pesos, sobrante de la construcción, esta gente humilde tiene principios y la virtud de la honradez, se los dejo de tarea. anaisabelcruzhernandez@hotmail.com
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