Regresa el futbol a Veracruz

La ingeniera Ana María Macías Juárez, propietaria del equipo de futbol Atlético de Veracruz, está segura que el gobierno de Cuitláhuac García accederá a que regrese el deporte consentido de los veracruzanos y se vuelvan a revivir las hazañas que dejaron una imborrable huella en el estadio Luis ‘El Pirata’ Fuente, que en la época reciente del gobierno de Miguel Alemán alcanzaron los Tiburones Rojos el codiciado liderato de la primera división del balompié mexicano.

El contar con el renovado estadio y las instalaciones adecuadas permitiría que los nuevos valores dejen de buscar nuevos equipos como el caso de estos jóvenes que lograron el último boleto para ir a los juegos olímpicos de Tokio.

Nada que ver con los adeudos pendientes que tiene el empresario orizabeño Fidel Kuri con los jugadores y grupos que se aprovechan de la ocasión de un equipo que dejara grandes recuerdos.

Apatía hacia los comicios

Dentro del estudio de una encuestadora de prestigio realizó sobre el interés que puede tener el común de la gente del estado de Veracruz sobre los próximos comicios intermedios, que la clase política los considera como los más importantes por la coalición que llevan a cabo los tres partidos considerados como mayoritarios para detener el avance de Morena y sobre todo evitar que tenga la mayoría en la Cámara de Diputados Federales que es donde se autorizan los presupuestos.

La idea central de esta extraña oposición de la vieja y corrupta izquierda, con la extrema derecha panista y los priístas acostumbrados a vivir de los recursos públicos, es evitar que el gobierno federal siga ayudando a los adultos mayores, las becas a los estudiantes y apoyos a los discapacitados, porque consideran que son los votantes cautivos de Morena y bloquear la tarea de la cuarta transformación del país.

La sorpresa fue mayúscula al comprobar que a los veracruzanos ni les interesan los comicios intermedios y no conocen a los candidatos de los partidos que van a competir. Si saben de la clase política que gobernó en el pasado el estado y recuerdan a los gobernadores de los cuales no se salva ninguno de ser calificado como ladrones y corruptos.

Hablar de los nuevos funcionarios públicos no les interesa por considerarlos ajenos a los serios problemas que confronta la ciudadanía.

Es un grupo que sólo les interesa a los columnistas de los medios impresos que los promueven, pero aquel viejo adagio que el veracruzano es un ente politizado es un mito.

Puede haber en esta ocasión un abstencionismo muy elevado lo que provocaría la desaparición de viejos y nuevos partidos que no alcancen el registro que se les exige para sobrevivir.

Más notarios que boleros en el puerto

La arraigada costumbre de los gobernadores especialmente los priístas que cuando iban de salida regalaban a diestra y siniestra Notarías a todos sus funcionarios del gabinete. De manera espacial a los amigos, amantes y los ricos que ofrecían dinero.

Se recuerdan con este reparto masivo como si fueran volantes a don Agustín Acosta Lagunes, Patricio Chirinos y el que no se midió fue Fidel Herrera Beltrán, hace memoria el prestigiado abogado Carlos Campos que en el puerto de Veracruz había más notarios que boleros.

Javier Duarte de Ochoa por andar de pelada no pudo repartir estos codiciados cargos.

Con el tío Fide de un solo jalón un centenar de nuevos fedatarios.