Lluvia de ataques y fuego amigo en el PAN

Parece que en el PAN no entienden que el desquebrajamiento de la unidad al interior del PAN no beneficia a nadie. Y sin duda, que uno de los grupos el clan Yunes le apuesta a lo mismo de siempre, a la confrontación y a la división, pues es lo que les ha funcionado, pero ahora, son los primeros que deberían ponderar muy a fondo lo que pueda pasar.

Y es que analistas que dan seguimiento a la guerra que han desatado a hacia la vida interna de ese partido consideran que ante la falta de argumentos que realmente convenzan, todo apunta que son quienes han filtrado nuevamente información falsa para pretender pasar de victimarios a víctimas con el objetivo de confundir a los militantes panistas, tendiendo cortinas de humo ante la opinión pública en general.

Este sábado la visita al puerto de Veracruz del líder estatal del PAN, Joaquín Guzmán Avilés se dio en medio de una cascada de chismes y dimes y diretes.

Lo que parece no aguantan del bando Yunes, que obviamente no está contento con la dirigencia de ‘El Chapito’ azul son las declaraciones institucionales que hace a los medios de comunicación, en donde refiere constantemente la imparcialidad con la que se debe manejar el consejo estatal en la elección interna de los candidatos a elección popular que cumplan con la ley.

Y es en esto último en donde todos saben que Miguel Ángel Yunes Márquez no cumple con la residencia que establece la Constitución de Veracruz, por lo que sí tiene legítimo derecho a aspirar y participar en una contienda interna para un cargo de elección popular, pero de tratarse de alcaldía sólo podría en la de Boca del Río, según las acotaciones legales que se han evidenciado, posición, por cierto, que en su pasada reunión con Marko Cortés, líder nacional del PAN, éste les reiteró que era suya.

Aseguran que Yunes está cosechando lo que sembró. Pues basta recordar que el cacique de Tantoyuca no olvida los agravios y la traición del máximo jerarca del clan del Estero cuando éste último fungió como gobernador de Veracruz.

La auditoría ordenada a su gestión como titular de Sedarpa, en el bienio yunista, fue el detonante que lo hizo reflexionar para dar un viraje hacia mejores horizontes y romper. Y que por cierto parece y extrañamente, ser las mismas seis denuncias a las que le están soplando para que en el régimen de Morena se proceda en su contra, y que en su comparecencia el mismo titular de Sedarpa, las retomó ante diversas preguntas.

Y como en política no es indio el que no se venga, pues no se duda que el líder partidista haga lo propio tejiendo alianzas con los grupos que más confían y con los que sabe que tendrá triunfos asegurados sin caer en escenarios de conflictos legales.

El lema de Guzmán Avilés que ha asumido es el de “Ni perdón ni olvido”.

Pero además, existen las versiones que al líder panista en el estado de Veracruz le han llovido de forma directa y sin publicitar por miedo, cascadas de quejas de muchos panistas porteños a quienes los Yunes del Estero han agraviado y marginado, dejándoles de lado y ponderando a sus amigos y círculos sociales en los “huesos” de cada proyecto que encabezan, relegando a la militancia.

Sin embargo, es un hecho que el clan busca a toda forma arrebatar la candidatura panista en el Puerto de Veracruz para empoderar a Miguelito.

Así tengan que vender su alma al diablo y sin importar los colores que tengan que portar en sus camisetas -roja, amarilla, naranja o azul-, los sirios del Estero saben que no las tienen todas consigo con la militancia, no obstante al interior es sabido que están preocupados porque los números no les dan y por ello están empleando todo tipo de artimañas políticas y mediáticas.

Para los dos Migueles y el alcalde Fernando, la doctrina partidaria que tanto presumen y de la que tanto se enorgullecen los verdaderos panistas, es letra muerta. La queja principal redunda en ello, según lo que tiene en el escritorio el propio dirigente oriundo de Tantoyuca.

Para ellos el poder se gana a punta de amenazas, coacción y dinero y hasta golpes.

La preocupación principal, a su vez, de Guzmán Avilés es  bajo la pregunta ¿Y los militantes? ¿Otra vez serán ninguneados por los Yunes del Estero?

MUY EN CORTO

EN MORENA TAMBIÉN SE CUECEN HABAS. La que negó haber sido nombrada delegada del Comité Ejecutivo Nacional de Morena (CEN) en Veracruz, es la senadora Mónica Fernández Balboa y con lo que echa por la borda lo dicho por Gonzalo Vicencio, secretario general en el Estado. Y quien representa un ala de las corrientes que disputan la dirigencia de dicho partido.

“Compañeros y compañeras de @CENMorenaMX #Veracruz, ha estado circulando información falsa relativa a mi presencia como delegada de Morena en su bello estado.

No es correcta esta información. Pero aprovecho para enviarles un saludo fraterno”, posteó la senadora.

Y es que Gonzalo Vicencio Flores, Secretario General del Comité Ejecutivo Estatal de Morena en Veracruz, a quien acusaron los morenistas de haber querido engañar a la militancia, pues a través de redes sociales afirmó que dicha designación era una realidad.